Y quedó con la candidatura pluri al Senado.
Más aún:
Para bien o para mal, sabrá el viejo del pueblo, pactó con su antiguo adversario, Miguel íngel Yunes Linares.
Se ignora si habrí­a ganado Dante, más que Yunes. O Yunes, más que Dante. Y/o en todo caso, los dos, igual.
El caso es que, por ahora, y con la alianza, el MC con PAN y PRD lanzando al primogénito para ocupar el trono imperial y faraónico, ninguno perdió. Pacto polí­tico, pacto efí­mero, pacto quizá diabólico piensan las cúpulas partidistas. Pero ellos, para adelante.
Y más, claro, será, si Dante y Yunes ganan con Ricardo Anaya la presidencia de la república y con el hijo la silla embrujada del palacio de Xalapa.
El millón de indí­genas y los dos millones de campesinos lo festinarán en sus casas.
La noche del primero de julio será de verbena popular en las montañas de Veracruz. El dí­a de la justicia social.

DOS. “El polí­tico más completo del paí­s”

Después de su estancia en el penal de Pacho Viejo, muchos quisieron colgar una cruz más a Dante. En algunos medios se la habrí­an puesto. Pero se levantó.
Desde entonces, cohabita en el altiplano, la sede de los poderes federales. Ernesto Zedillo, su verdugo, está exiliado en Estados Unidos. Patricio Chirinos, retirado de la polí­tica, viviendo solo como ha dicho el gobernador Yunes. Dante, feliz, de que el niño indí­gena del “Movimiento naranjo” lidera las canciones de la jornada electoral.
Es el único polí­tico de Veracruz en el carril nacional. Yunes, el segundo. Pero Dante, con su partido polí­tico y que será, es mejor dicho, la gran pinza electoral del año que corre. Con los votos duros del MC, los candidatos, empezando por Ricardo Anaya, pueden coronarse.
El factor sorpresa fue decisivo en su jugada con casa llena y jonrón. Que ningún cargo público buscaba con el llamado “Frente por México”. Que aspirarí­a a jefe del gabinete polí­tico de Alejandra Barrales si gana la Jefatura del Gobierno de la Ciudad de México. Que serí­a el poder atrás de la sombra.
Ni uno ni otro. Ya estuvo en el Senado y ahora volverá. Y ahí­ se topará, entre 127 más, con Indira Rosales San Román, la candidata pluri del PAN, PRD y MC a la curul senatorial. Y si a su lado será su discí­pula.
“Maestro” le llamaron Ricardo Anaya y Alejandra Barrales en los dí­as estelares de la negociación polí­tica para elegir al candidato presidencial.
“El polí­tico más completo del paí­s” le dijo Ricardo Monreal, el ex gobernador de Zacatecas que va al Congreso de la Unión ví­a MORENA.
Dante, en las grandes ligas.

TRES. El tirador de la luna

Dante es un hombre de estatura alta, pero parece un gigante de la polí­tica como decí­a el historiador Daniel Cosí­o Villegas de los hombres de la Reforma, uno de ellos, Benito Juárez, el héroe número uno de AMLO, el examigo de Dante.
Por ejemplo, Dante formó su partido polí­tico, pero desde un principio, “tirando a la luna”, es decir, con presencia nacional y ha sobrevivido a varios huracanes.
El senador Héctor Yunes Landa formó su asociación polí­tica, Alianza generacional y, primero, la dejó en un grupo local, y segundo, sin crecer a partido polí­tico.
Felipe Amadeo Flores Espinoza, ex de todo, mantiene a su “Ví­a Veracruzana”, en la aldea, casi casi para operar en su rancho, “La chicharra” en Cotaxtla, chicharreando para los paisanos.
El biólogo Alfredo Tress, su ex secretario particular en el penal de Pacho Viejo, a quien encumbró como diputado local y dirigente de Convergencia por la Democracia, se deslindó de su sombra, formó su partido polí­tico con la bendición de Fidel Herrera Beltrán, y se perdió en la noche oscura y siniestra del tiempo.
En 1998, Ignacio Morales Lechuga fue candidato independiente a gobernador ante el priista Miguel Alemán Velasco, y el partido local que lo lanzara ya desapareció.
Los 400 Pueblos y la UGCP de César del íngel y Margarito Montes Parra, ni a charalitos llegaron.
Dante, con su MC, está a punto de entrar a Los Pinos. O cuando menos, igual que su tirador de la luna, ha llegado más lejos que todos.

CUATRO. El pacto con Yunes…

Tirios y troyanos ahondaron sus diferencias con las últimas jugadas de Dante.
“Me decepcionó, dijeron los más, cuando pacto con Yunes”.
Pero desde que Eva sedujo al padre Adán para comerse la manzana, nadie está contento con los otros.
Y ni modo de andar en la vida tratando de quedar bien con todos, porque la vida es una torre de Babel.
En todo caso, Dante, igual que Yunes, son polí­ticos pragmáticos, como también Andrés Manuel López Obrador, de MORENA, sus alianzas con el lí­der minero, refugiado en Canadá, Napoleón Gómez Urrutia, y la gente, hasta el nieto, de la profe Elba Esther Gordillo, que sólo ellos representan el corporativismo priista para ganar el poder.
Cosas de la vida tan rara, extraña y misteriosa:
En el año 2006, Dante Delgado fue aliado con AMLO cuando el plantón en la avenida Reforma en contra de Felipe Calderón.
Y ahora, están enfrentados, cada uno con un proyecto polí­tico.
Dante es “un torero en tarde de luces”.