C: Antonio Mací­as, el padre de Karime. Yunes lo acusó de haberse beneficiado con recursos públicos tanto en el Fidelato (Javier Duarte subsecretario y secretario de Finanzas y Planeación), y ni se diga en el sexenio anterior.
D: Luis íngel Bravo Contreras, el Fiscal nombrado por el Congreso para nueve años, pero que fue descarrilado por la yunicidad.
El botón nuclear ha sido aplicado. El diputado local de MORENA, Nicolás Cruz de la Cruz, miembro de la Comisión de Seguridad Pública de la LXIV Legislatura, lo ha puesto en la mira por el caso de los desaparecidos y la desaparición forzada.
Y E: Felipe Amadeo Flores Espinoza, el procurador de Justicia en un tramo del duartazgo, por las mismas razones que Bravo Contreras según el legislador morenista.
Ellos han de ser investigados, aseguró el diputado, porque “no sabemos hasta dónde llegaba esta red de corrupción”.
Ya se verá, entonces, si el tiempo constitucional alcanza pues el bienio terminará en 9 meses.

DOS. “El premio mayor”…

Del quinteto de personajes anteriores dos tendrí­an prioridad para la yunicidad azul Fidel Herrera y Karime Mací­as.
Ellos son, digamos, “la joya de la corona”, “la cereza del pastel”, “las 8 columnas”, “el premio mayor de la loterí­a”, “el melate”.
En el caso del “tí­o”, más de veinte años de rencores, resentimientos y odios compartidos.
Y en el caso de Karime, “el poder atrás del trono” que fue durante casi seis años del mandato de su esposo y que la llevaron a decir que merecí­a abundancia, porque, digamos, “que gí¼eva trabajar en el DIF”.
Incluso, un sondeo azul de opinión reveló que la población de Veracruz espera la captura de Karime, más, mucho más que la de Duarte, y quien para acalambrar al gobernador Yunes interpuso una denuncia penal más en su contra en la Procuradurí­a General de Justicia de la República, PGR, acusado de enriquecimiento ilí­cito.
Además, claro, de la denuncia penal que interpusiera en su contra en el año 2016.
Más la denuncia penal de los diputados federales del PRI (Érick Lagos, Jorge Carvallo, Édgar Spinoso, Adolfo Mota, Alberto Silva y Tarek Abdalá, entre otros, los promotores) y que a la fecha, pareciera “dormir el sueño de los justos”.
Con todo, peleador callejero, fajador de cantina, Yunes Linares está habituado a peores vientos huracanados (Roberto Madrazo Pintado, Elba Esther Gordillo, Rafael Valle Moreno, Marcela Lombardo, etcétera) y ha salido airoso.
Incluso, su bilirrubina se multiplica con los vientos huracanados y entre más recios más ganas de seguir luchando.

TRES. El calambre suena y resuena

Un trí­o de diputados locales (Sebastián Reyes, Eva Felí­citas Cadena y Miriam Judith González Sheridan) desertaron de MORENA, el partido de AMLO, y desde entonces, refugiados en el PAN han bombardeado a los pejistas de Veracruz, entre ellos, Rocí­o Nahle, Cuitláhuac Garcí­a y Amado Cruz Malpica.
Ahora, y de manera rara y extraña, indicativa y significativa, otro legislador de MORENA, Nicolás de la Cruz, pide fincar responsabilidades a Bravo Contreras y Flores Espinoza, éste último figura consagrada del priismo, amigo, incluso, del gobernador Yunes, por los pecados de omisión cometidos en la Fiscalí­a y Seguridad Públicos ante las denuncias de las personas secuestrados y desaparecidos en el sexenio anterior.
Más aún:
También exige que “los testigos de identidad resguardada que llevaron a la detención de altos mandos policiacos por el delito de desaparición forzada” sean enjuiciados (AVC, Isabel Ortega).
Y, bueno, sin que nadie peque de oficioso, pero el planteamiento lleva chanfle.
Será, acaso, que otro morenista se está alineando, como los astros, alrededor de la yunicidad azul.
En todo caso, el calambre suena y resuena.

CUATRO. Entre Yunes y Fidel

El Yunes azul estremeció a Veracruz cuando empezó con la captura de los duartistas. Al momento, treinta y dos, de los cuales, diecisiete son polí­ticos y los otros policí­as.
Nunca, jamás, la Procuradurí­a General de Justicia de la República, PGR, hubiera procedido a la captura de Javier Duarte, sin la insistencia de Miguel íngel Yunes Linares, quien entregara las pruebas del (presunto) saqueo (el proceso penal camina) al presidente Enrique Peña Nieto con copia a la PGR.
El golpe más huracanado ha sido el último, como es la captura de los diecinueve policí­as y jefes policiacos, acusados, todos, de desaparición forzada, delito de lesa humanidad, sórdidas y siniestras historias alrededor de la alianza de polí­ticos, policí­as y narcos para secuestrar y desaparecer personas, muchos, muchí­simos civiles, incluidos niños.
Desde luego, el golpe estelar se llama Fidel Herrera, Karime Mací­as y/o Antonio Mací­as.
Luego de más de veinte años de vivir en el filo de la navaja en su relación con Fidel, la razón superior de su estadí­a como gobernador es enviarlo al penal de Pacho Viejo, considerando que ha encarcelado a tres antecesores, como Dante Delgado Rannauro, Javier Herrera y Flavino Rí­os Alvarado.
Y más porque al “tí­o” de Nopaltepec lo ha acusado de todo. Incluso, hasta de comandar un grupo de los Zetas.
Y si se considera el desví­o de recursos en el año 2007 del que habla el ORFIS…
Y el trascendido de que uno que otro jefe policiaco en la mira de la desaparición forzada laboró con Fidel…
Y la escopeta del diputado de MORENA en contra de Flores Espinoza y Bravo Contreras, entonces, el gobernador Yunes se fermenta una y otra vez con la posibilidad.
La polí­tica en Veracruz sólo tiene dos extremos: es Yunes o Fidel Herrera.