La primera priista detenida en el gobierno panista de Miguel íngel Yunes Linares salió libre del Reclusorio Zona 1, en Pacho Viejo la tarde de este viernes 16 de febrero del 2018 y será vigilada en libertad por tres años.

Topacio Citlali Hernández Ramí­rez obtuvo su libertad después de 14 meses y 3 dí­as en prisión recluida por los delitos de motí­n, contra las ví­as generales de comunicación y medios de transporte e incitación a cometer un delito.

La ex presa polí­tica fue detenida en el gobierno del cambio -como se autonombraba la coalición PAN-PRD- por encabezar una manifestación en la carretera Xalapa-Veracruz, a la altura de la Secretarí­a de Educación de Veracruz (SEV), exigiendo plazas para maestros.

Al salir del penal donde permanecen ex funcionarios priistas, pidió perdón a Yunes Linares, considerándolo un "hombre duro pero de palabra" y agradeció al Fiscal General del Estado, Jorge Wí­nckler Ortiz de aprobar el proceso abreviado que llevaban en su contra.

Con su libertad, Topacio citó que cumplirá su parte del acuerdo, comprometiéndose a no volver a alterar la "paz social", como lo ocurrido el dí­a de su detención, el pasado 12 de diciembre de 2016.

"Quien llega a Pacho Viejo, llega porque hay algo" infirió en una breve entrevista, para justificar que no fue presa polí­tica.

Las causas penales 267/2017 y 201/2017 de la lí­der de la Agrupación Arco, Topacio Hernández inició por ocupar con sus seguidores ramas y piedras para impedir el tránsito de vehí­culos particulares, transporte público y trailers con carga en la carretera federal Xalapa-Veracruz.

Los conductores intentaron pasar buscando un diálogo. No lo lograron. La cercaní­a de terminar el lapso para transitar vehí­culos de carga, de diez a doce del dí­a, orilló a que tres traileros descendieran de sus unidades y ofrecieran dinero para continuar el camino.

Los manifestantes, incluida Topacio, aceptaron e incitaron a más automovilistas para entregar dinero a cambio de abrirles el paso.

La última recreación de los hechos, ocurrida en su audiencia de imputación, la priista aceptó ser culpable, dando pie a que el fiscal del caso, Benito Carrascal Ramí­rez, propusiera una sentencia de cuatro años y 90 dí­as de multa.

Dicha propuesta quedó cancelada este viernes ante los Jueces de Control: Marco Antonio Rodrí­guez Lobato y Verónica Portilla Suazo.

Por tanto, la ex presa estará sujeta a estricta supervisión judicial y diversas condiciones impuestas por un plazo de tres años, incluido, no tener contacto con el pseudo lí­der social, Arnulfo Reyes Cruz, apodado “El Vaquero”, a quien se señala como autor intelectual de los hechos que la llevaron a prisión.

El caso estuvo a cargo del abogado Rodolfo Reus Medina.