Mario Vargas Saldaña, cuatro ocasiones también diputado federal, se tomaba cuarenta cafés al dí­a siempre con reporteros para intercambiar barajitas… Miguel Alemán Velasco decí­a (ha de decir aún) que él nunca, jamás, da consejos, “porque los inteligentes no los necesitan y los pendejos no hacen caso”… En su tiempo de alcalde jarocho, Francisco ívila Camberos, escribió mil cartas a su equipo de colaboradores, de igual manera como, digamos, Agustí­n Acosta Lagunes envió más de cinco mil tarjetas informativas, con su puño y letra, dando órdenes al gabinete legal… Por cierto, un dí­a, Acosta Lagunes cesó a un agente de Tránsito a quien sorprendió en la calle comiendo tortas con un refresco de cola… Rafael Hernández Ochoa solí­a ejercer el derecho de pernada en su sexenio, a tono con Pedro Páramo en Comala… Gonzalo Morgado Huesca suele decir que con la calumnia algo queda… Javier Duarte estaba seguro de que como gobernador se habí­a vuelto sexy… Antonio López de Santa Anna, 3 veces gobernador de Veracruz y once veces presidente de la república, gran jugador de cartas y apuestas en los gallos, sedujo a los 27 años de edad a la hermana de Agustí­n de Iturbide, de 60 años, sólo para entrar “al reino de los cielos” de su Alteza Serení­sima… La mejor estrategia para gobernar era la de Rafael Murillo Vidal, quien solí­a quedarse dormido en las juntas para así­ cansar a los demás, sobre todo, cuando se trataba de asuntos polvorientos…

ROMPEOLAS: Cada generación vive su tiempo a plenitud, segura y convencida de que es el mejor de los tiempos… Pero los nacidos en la década de los 50 y 60 en el siglo pasado fueron privilegiados… Por ejemplo, aquel fue el tiempo de Elvis Presley y Los Beatles y estaba terminando la era de Frank Sinatra, el cantante de la voz de oro que fue tan amigo de la mafia siciliana en Nueva York… Fue el tiempo del pelo largo y las alpargatas y de los Avándaros y de los movimientos estudiantiles en Parí­s, Checoslovaquia y México, cuando las juventudes desafiaban al ejército y cuando, claro, de igual manera, las chicas con sus minifaldas de 35 centí­metros regalaban flores a los soldados represivos… Fue el tiempo de los grandes lí­deres mundiales, entre ellos, Patricio Lumumba, Ho Chi Min, Ernesto el Che Guevara, Fidel Castro y Gandhi… El tiempo de las grandes guerras en ífrica e Indochina y de Vietnam, cuando en el otro extremo del mundo reprodujeron la estrategia de los realistas en 1800 en México con la guerra de Independencia en que colgaban los cadáveres de los campesinos de los árboles a la orilla del camino rural para sembrar la incertidumbre, la zozobra y el miedo en la población… Fue, oh fascinación, el tiempo del amor libre y de los rapidines en la oficina, en el baño de los restaurantes y en el coche… El tiempo cuando las juventudes del mundo lloraron por las manos que los militares de la dictadura cortaron al cantante chilero, Ví­ctor Jara, hermano de Violeta Parra (“Gracias la vida que le debo tanto”), y a quien asesinaron los policí­as y soldados del general siniestro, Augusto Pinochet… Fue, como escribe Charles Dickens en “Historia de dos ciudades”, “el mejor de los tiempos”… Tiempos de revoltura social, pero también de sorpresas fascinantes, imborrables, momentos hilarantes en la historia de aquella generación…

ASTILLEROS: Muchas cositas han cambiado en la vida social… Y aun cuando se ignora si será para bien o para mal, en muchos pueblos hay una especie, digamos, de liberación sexual en su más alto voltaje… Y aun cuando de acuerdo con el relato bí­blico Sodoma y Gomorra sucumbieron ante las llamas, el fuego eterno, por tanta promiscuidad, hay muchos pueblos, pueblos rurales, pueblos urbanos, donde las relaciones í­ntimas se han vuelto una revelación… Por ejemplo: los adolescentes inician el despertar sexual hacia los 12 y 13 años de edad… Y por eso mismo, Veracruz ocupa los primeros lugares en chicas embarazadas que apenas están egresando del sexto año de primaria o cursan el primero año de secundaria… Ahora, los chicos han creado un nuevo concepto sexual y consiste en hacer el sexo como amiguitos… Además son relaciones efí­meras, porque en la siguiente semana ya tienen nueva pareja… Más aún: muchos jóvenes se están casando y a la primera de cambios se divorcian… Insólito: entre los primos se quitan a su pareja y nada pasa y hasta forman trí­os y cuartetos… Todaví­a más: de pronto, la infidelidad entre matrimonios ha alcanzado dimensión estelar, porque cada vez se multiplican, a tono, digamos, con el proverbio popular de “pueblo chico, infierno grande”… Nadie se asusta ni se da “golpes de pecho”, pero si la pedofilia existe desde el relato bí­blico, pareciera ahora que es más notorio y público… Signos, pues, de cada generación…