“La libertad siempre tiene problemas, es una metáfora, hay que luchar por ella, nosotros tenemos la resistencia. Soy persistente a pesar de no tener seguro, el dí­a de mañana yo voy a seguir haciendo teatro, hasta el fin de mi vida seguiré haciendo teatro y esa es la libertad”, refirió el dramaturgo Oceransky.

A finales de la anterior administración encabezada por Javier Duarte de Ochoa, el DIF estatal desocupó el espacio de Manos Veracruzanas ubicado en la avenida Ignacio de la Llave -donde se ubica este espacio cultural dedicado a las artes escénicas-.

Al desocuparse, notificaron a los artistas veracruzanos que también debí­an despedirse del espacio, ya que no les pertenecí­a.

Por más de siete años, el Teatro La Libertad fue sede de presentaciones de grupos locales e internacionales. Pero a finales del 2016, en las primeras semanas del gobierno panista de Miguel íngel Yunes Linares, el director del Instituto de Pensiones del Estado (IPE), Hilario Barcelata Chávez dio a conocer la urgencia de desalojar el espacio cultural.

El argumento se concentró en no poseer el inmueble, ya que se contaba con documentación donde se señala como dueño único al Instituto de Pensiones del Estado (IPE).

“Hubo una disputa y es cierto que los aspectos culturales son importantes y deben ser promovidos, es cierto que el señor Ocesransky tiene reconocimiento nacional muy importante como director de teatro, pero el IPE es el dueño del inmueble y no existe ningún convenio ni contrato con el instituto para que estén ahí­”, respondió en los primeros dí­as de su función, Barcelata Chávez.

El acuerdo que buscó el director del IPE mencionaba solventar los gastos del inmueble, es decir, pagar mensualmente una renta por ocupar el espacio destinado a actividades culturales de talla local, nacional e internacional.

De acuerdo con el director del Teatro La Libertad, era imposible costear la renta cuando los artistas viven “al dí­a”, sin salarios fijos u horas que cumplir en una cómoda oficina.

Ante la imposibilidad de pagar la renta, desalojaron la propiedad.

El último reporte que dio Barcelata Chávez, director del IPE -dependencia estatal dueña del terreno-, el área serí­a ofertada para alcanzar una suma superior a los 37 millones de pesos, de acuerdo a un evaluó realizado en años anteriores.

Al igual que el Teatro La Libertad, otros bienes inmuebles del IPE, que están en comodato serí­an ofertados para subsanar la situación económica del Instituto de Pensiones del Estado.

Lo recaudado no alcanzarí­a para “salvar” al IPE, tampoco para cubrir el déficit que se generó durante los dos últimos sexenios en Veracruz.

Entre los inmuebles que serí­an puestos a la venta, el director del IPE mencionó el predio El Capulí­n, donde se hizo el comodato con la Secretarí­a de Seguridad Pública (SSP), debido a que es grande y podí­a ser invadido. Otro más es Garnica, que también lo tiene la SSP.

Uno más ubicado en Boca del Rí­o, con un costo de 24 millones de pesos. En total se contabilizan 45 bienes inmuebles, pero no todos se colocaron en venta, pues también se suman la torre IPE, el estacionamiento y más.

“NO ES UN NEGOCIO, TAMBIÉN ES LIBERTAD”

Abraham Oceransky evitó criticar hacia algún funcionario en especial, se remitió a recordar la situación que exhibe el Teatro La Libertad, un espacio donde artistas locales, nacionales e internacionales se organizaban para promover actividades a los veracruzanos.

“Hubo muchos desfalcos, vemos que Duarte está en la cárcel y que le vaya bien ahí­, pues somos ví­ctimas colaterales de todo lo que pasó. Cuando se trata de cultura es lo último que se revisa, lo primero que se revisa es economí­a, con salud, con todo eso que se ve primero cuando entra un gobierno”.

Desde el proceso electoral donde salió ganador Yunes Linares, el inmueble fue desalojado, cumpliendo casi un año sin trabajo para decena de artistas que en semanas presentaron y organizaron actividades culturales.

Al no generar estas actividades, no generan ingresos para mantener sus obras y costear parte de las presentaciones que pactan con colegas de talla mundial.

En el transcurso del desalojo, estos colegas promovieron cartas en redes sociales, hacia la Secretarí­a de Cultura, hacia cualquier ente gubernamental que frenara el despojo de un foro con 180 butacas.

El apoyo se puede aún consultar en redes, a través de la cuenta de Facebook “Teatro La Libertad”, donde artistas de paí­ses como España, Brasil y Francia, lanzaron videos de repudio al desalojo en las primeras semanas del gobierno panista.

Las semanas siguen corriendo y no reciben un acuerdo para una nueva sede o reapertura del mismo inmueble.

“Hacer teatro es una bandera, es una esperanza así­ que les pido que apoyen nuestro trabajo, que hacer teatro es muestra de hacer cosas buenas aún en la adversidad, vale la pena, dar pasos buenos, pequeños aunque sea pero para beneficio de todos. Para eso es el arte, para abrir conciencias” agregó Oceransky.