En Veracruz, gobernado actualmente por el panista Miguel íngel Yunes Linares, las oportunidades de empleo son carentes, a menos que tengas más de tres años de experiencia y familiares o conocidos en empresas.

Por cuatro años, Carlos cursó una ingenierí­a en el Tecnológico de Xalapa. Desde que egresó no ha conseguido trabajo, se la lleva con algunos trabajos temporales que no le convencen por carecer de crecimiento laboral.

Trabajar temporalmente en una tienda de conveniencia, restaurante como mesero o chofer, son ajenas a sus intereses, busca consumar su ingenierí­a o compensarla con un área donde remuneren su esfuerzo estudiantil.

No tiene hijos, tampoco está casado pero planea mejorar su estilo de vida para cuando sea el momento de esa etapa.

En la primera feria del empleo de este 2017, en la ciudad de Xalapa, Carlos llenó los formatos que el stand de la Secretarí­a de Seguridad Pública (SSP) ofrece para posteriormente seguir en los procedimientos que la dependencia estatal disponga.

La situación de inseguridad en la entidad lo hace dudar, pero las omite al decir “da un poco de miedo pero no hay de otra”.

En los últimos cuatro años, la SSP ha sido mencionada por elementos de la corporación vinculados al Crimen Organizado, a la desaparición forzada de personas o abuso de autoridad.

“Vemos muchos policí­as que se meten en esas cosas y otros no, pero da un poco de miedo pero no hay de otra. Tal vez si es peligroso, por lo que se va viviendo de asaltos y eso, en todo el estado, pero a veces el hacer las cosas bien va por esa parte”, analizó en voz alta.

La convocatoria de reclutamiento, selección, evaluación e ingreso corresponde a la nueva Policí­a Estatal que implementa el gobierno de dos años.

El Gobierno del Estado de Veracruz, a través de la Secretarí­a de Seguridad Pública, dirigida por Jaime Tellez Marie, hizo circular por la web y en las afueras de la dependencia estatal, ubicada a un costado de Palacio de Gobierno, la convocatoria.

“Una policí­a dignificada, confiable y con vocación de servicio, una policí­a de orden, control y disciplina, altamente equipada y unida para defender la paz y tranquilidad de los veracruzanos”, se lee en las primeras letras del aviso.

Carlos Jiménez dijo tener su acta de nacimiento, constancia de estudios, credencial de elector vigente, servicio militar y comprobante de domicilio. Siendo estos los primeros requisitos que le exigen para incluirse a la Policí­a Estatal.

La convocatoria oficial exhibe hasta 15 requisitos; mayorí­a de edad y no exceder los 35 años cumplidos, estatura mí­nima de 1.63 para hombres y 1.55 para mujeres, con peso acorde a su estatura.

No contar con inserciones, dibujos o grabados con sustancias colorantes o cualquier otra técnica, como tatuajes, visibles con el uniforme. No estar sujeto a proceso penal, tampoco tener perforaciones visibles o estar sujeto a delito doloso.

No presentar problemas visuales, gozar de buena salud, no padecer alcoholismo o consumo de sustancias psicotrópicas, estupefacientes u otras que produzcan efectos similares.

Al aprobarlas, Carlos tendrá que firmar un compromiso con los siguientes términos:

a) Someterse a las evaluaciones de control de confianza.
b) Declaración bajo protesta de decir verdad, que la información y documentación proporcionada es auténtica, así­ como su autorización para que la institución realice las investigaciones que sean pertinentes para corroborarla.
c) Manifestación de aceptación sin reserva alguna, del resultado del proceso de reclutamiento, selección, evaluación e ingreso, el que será definitivo, inapelable y confidencial.
d) Carta-compromiso para sujetarse a las normas y disposiciones que en materia disciplinaria emita el Centro de Estudios e Investigación en Seguridad, así­ como aceptar las sanciones que en consecuencia se apliquen, incluyendo la expulsión definitiva del proceso de selección.

Al joven ingeniero no le impide seguir con su intención la extensa lista de requisitos, documentación y observaciones, le alienta un trabajo seguro a pesar de exponer su vida.

“Es más seguro trabajar con ellos, entramos con prestaciones, son muy buenas y haces antigí¼edad para cotizar. Los salarios son buenos y como todo, hay pro y contra, te mandan a otros lados pero por la parte de aquí­ en Xalapa, de Fasti y esas tiendas no te dan prestaciones, tampoco estabilidad, ni crecimiento”, continuó su reflexión en voz alta.

Nunca decidió o planeó ser policí­a en un estado donde algunos elementos están vinculados a lo opuesto de sus funciones. Él sigue buscando un empleo fijo donde generar ingresos para mejorar su estilo de vida, que en los últimos 24 meses, ha sido crí­tico.

Ya viajó a Querétaro, por recomendación de un amigo, con la esperanza de conseguir trabajo como ingeniero. No lo logró, le exigieron tres años de experiencia, mismo lapso que cumplió como egresado.

Acudió al puerto de Veracruz, a hora y media de Xalapa, le comentaron de vacantes en Tenaris Tamsa, empresa conocida en la entidad. También le rechazaron por no tener familiares o conocidos que le dieran “palancazo” de acceso.

“Dentro de la policí­a hay esa posibilidad de crecer, es un trabajo más estable. Dan seguro, puedo cotizar en Infonavit y ganarí­a como 13 mil al mes”, agregó.

Carlos no busca rondar las calles de la entidad con un arma de fuego entregada por el Gobierno del Estado a través de la Secretarí­a de Seguridad Pública, intenta conseguir un puesto administrativo, al menos, seguro con el cumplimiento de la Ley General del Trabajo.

Desde que entregó sus documentos comentó dicho interés a los reclutadores, quienes le respondieron que eso tardará algunos meses o años, hasta que salga otra convocatoria donde lo retiren de las calles y resguarden en oficina.

Carlos es uno de los 400 nuevos perfiles que ocuparí­an la SSP.

De acuerdo a Pascual Perea, encargado del área de Reclutamiento y Selección de Personal en SSP en Ferias de Empleo, los 400 lugares disponibles, por el momento, ya que se ofertarán más, serán evaluados y becados durante cinco meses.

6 mil pesos, pago de alimentación y hospedaje será cubierto por la dependencia estatal anteriormente dirigida por Arturo Bermúdez Zurita, procesado por el delito de enriquecimiento ilí­cito y que permanece tras las rejas en el penal de Pacho Viejo.

Durante los meses de curso en la Academia El Lencero, los aspirantes a ser policí­as estatales, serán investigados por el Centro de Control y Confianza, para análisis psicológicos, descartar que tengan historial criminal y ví­nculos con la delincuencia organizada.