Sin ser reconocido como un guerrero, sin necesidad de dormir con los guantes puestos, todo aquel que se dedica a la polí­tica, debe entender que en la realidad cotidiana, se vive permanentemente "en una guerra sin derramamiento de sangre", aunque la lucha por llegar al poder y mantenerse en el, es permanente y nunca termina.

El éxito o la victoria que se alcanza en una lucha polí­tica, se goza y se disfruta más, cuando las batallas presentan mayores obstáculos que hay que vencer y nada es igual que resultar ganador en cualquier competencia. Por consiguiente es una mentira "que lo importante no es ganar sino competir".

Dos noticias acaparan la atención de los veracruzanos, por una parte la confirmación del Tribunal Electoral de Veracruz, del triunfo del licenciado Miguel íngel Yunes Linares, como candidato a gobernador de la alianza PAN-PRD, debe ser motivo de una gran alegrí­a para él y para todos aquellos que aportaron el trabajo polí­tico, sumando esfuerzos y talentos que hoy permiten cumplir la aspiración más grande que pueda tener un veracruzano.

Al mismo tiempo, el dí­a de hoy anuncia el SAT que se audita a varios gobiernos estatales, señalando al estado de Veracruz entre ellos y por su parte el gobernador del estado doctor Javier Duarte de Ochoa, precisó la importancia que tiene para él, demostrar en tiempos de "transparencia y rendición de cuentas", que su trabajo ha sido apegado al conjunto de leyes normativas de la función pública. El SAT agregó hoy que revisará informes y cuentas de 44 personas cercanas al doctor Duarte y quienes colaboramos en el gobierno de Duarte de Ochoa, confiamos en que todo saldrá bien para dar fin a las especulaciones.

Los representantes de los otros partidos que disputaron el cargo de gobernador, no se han pronunciado sobre la continuidad de las impugnaciones a la elección del 5 de junio pasado, aunque llama la atención, que el diputado Joaquí­n Rosendo Guzmán Avilés exprese su confianza en que el TRIFE confirmará la resolución emitida por el TEV, sin mayor dilación.

Del Plan Veracruzano de Desarrollo, se ha dicho por el gobernador electo, que la Universidad Veracruzana encabezada por la rectora Sara Ladrón de Guevara y el doctor Francisco Monfort Guillén, son quienes tendrán la responsabilidad de convocar a los sectores sociales de Veracruz, para que expresen sus quejas, propuestas y planteamientos de lo que quieren del nuevo gobierno en el periodo efí­mero de dos años que tendrá de duración.

Habrá que ver si como se acostumbra en la práctica polí­tica, el gobierno encabezado por el licenciado Yunes Linares, se divide en tres tercios o en dos anualidades para programar y ejecutar todas las obras y acciones que demanda la población al gobierno del estado y darse tiempo para construir la candidatura de su sucesor y sumarse al candidato de sus simpatí­as para la presidencia de la república.

Son muchas las tareas que tendrá el nuevo gobierno, por lo que en la futura administración estatal de Veracruz, no habrá tiempo para el ensayo y error; ni tampoco para buscar reflectores con obras de relumbrón y mucho menos para distraer recursos después de pagar los pasivos que como deudas institucionales deja la presente administración; y por último en dos años de gobierno, si se quiere dejar una imagen que merezca el reconocimiento y aprobación de los veracruzanos, el gobernante tampoco podrá distraerse impulsando la candidatura del sucesor que contenderá en el 2018.