Yunes, en la ruta equivocada
•Sigue en campaña electoral
•Desgaste innecesario
PASAMANOS: El góber electo, Miguel Angel Yunes Linares, está en la ruta equivocada.
La campaña electoral terminó el 5 de junio con su triunfo y no obstante, sigue en campaña.
Y a tiro por viaje.
Todos los días.
Luis Velázquez
Al paso que va… terminará diciendo todo lo que tenía que…, y de pronto, conrrerá el riesgo de que nadie le crea.
Y más, cuando aún faltan cuatro meses con ocho días para tomar posesión, lo que implica, asegura el maestro en Ciencias Políticas, un desgaste innecesario.
Todavía más: cada día anuncia una denuncia penal en contra del góber tuitero y los tuiteros de su gabinete legal y ampliado, y las denuncias han de estarse guardando en el archivo de la Fiscalía local y de la procuraduría General de Justicia de la república.
Lo peor: con sus denuncias pone sobreaviso a los denunciados y cada uno en su dependencia apresura a su químico contable, tipo Mauricio Audirac Murillo, para arreglar lo posible con miras a evitar la cárcel.
Más aún: tanto ha repetido las cosas que hasta los niños de primaria hablan del asunto, pero… lo ha cacareado en exceso, en vez, y por ejemplo, de que con bajo perfil, agazapado como las panteras, integre los expedientes y en el momento oportuno, dar el zarpazo, seguro de que los vientos serán favorables.
Se explica: un político con más de 20 años soñando con la gubernatura ahora electo vive el tiempo del ansia frenética.
Pero el desgaste puede ser terrible.
En todo caso, mejor convendría repartir el juego para que, digamos, los presidentes del CEN del PAN y PRD y hasta los diputados locales electos de ambos partidos entren al rafagueo en vez de que, por ejemplo, estén yendo a cada sesión parlamentaria como una especie de presencia intimidatoria.
BALAUSTRADAS: Según el profe, es la hora de que el góber electo se encierre con sus asesores para, entre otras cositas, instrumentar la estrategia administrativa para adelgazar el aparato gubernamental.
Primero, por la austeridad inevitable. Y segundo, porque el aparato está demasiado grasoso, como por ejemplo, el caso de tantos fideicomisos buenos para nada, mejor dicho, para repartir cargos públicos y desviar recursos.
Un montón de oficinas y dependencias repetitivas en sus funciones.
Demasiados, excesivos trámites burocráticos.
Es la hora, por ejemplo, de que el góber electo cabildee en la Ciudad de México los primeros cien días de su gobierno.
Pero más aún, la estrategia económica y financiera para lanzar un programa de obra pública.
Y por supuesto, planear en común acuerdo con el equipo y los grupos sociales y empresariales que lo apoyaron sin reservas y con toda la confianza del mundo.
En ningún momento, para cubrir favores, sino al contrario, para enaltecer el destino social de un Veracruz donde 6 de cada 10 habitantes están atrapados en la miseria y la pobreza según el Coneval.
Y si alguna duda existiera habría de preguntarse el resultado concreto y específico que el góber electo ha logrado con tantas denuncias.
Y veinte y las malas la respuesta es limitada.
El dinosaurio priista, Javier Duarte, sigue dando coletazos de muerte, pues todavía, y con todo, el sexenio sigue vigente.
Por eso, la estrategia política y de guerra sugiere atacar por otros lados para asestar un manotazo efectivo en el momento adecuado.
ESCALERAS: El Yunes azul, un político ex priista con muchos años de experiencia, ya es gobernador electo, pero sigue actuando como candidato, más que del PRD, del PAN, asegura el profe Ronzón.
Es más, ni siquiera Javier Corral en Chihuahua ni Carlos Joaquín en Quintana Roo, también góbers electos, operan ante César Duarte y Roberto Borge como Yunes Linares ante Javier Duarte.
En su frenesí, el Yunes azul ha mudado, por añadidura, en el líder natural del PAN en Veracruz, y se ha metido en la sucesión presidencial a partir de diciembre de 2016, pero quizá desde ahora, con un trío de aspirantes presidenciales 2018 a escoger, entre ellos, Margarita Zavala, el elbista Rafael Moreno Valle y Ricardo Anaya.
Y en su vorágine también ha ordenado que los diputados locales electos del PAN y PRD se postren en cada sesión parlamentaria de la LXIII Legislatura.
Y se ni diga el activismo mediático, mediático que es, igual, igualito que el góber fogoso.
Nadie dudaría, sin embargo, que dado su temperamento y bilirrubina continúe así, porque si tal cual la vida pública le ha funcionado y se ha mantenido en el imaginario social, entonces, para adelante.
Pero, cuidado, con el desfase entre la palabra y la acción, entre la teoría y la práctica, entre los dichos y los resultados, pues se corre el riesgo de volverse un demagogo en vez de un estadista, un parlanchín en vez de un político sólido, un lenguaraz en lugar de un Gómez Morín.