Mujeres para diputadas pluris
•PVEM las privilegió más que nadie
•Única esperanza para salir del túnel
PASAMANOS: Los partidos políticos cumplieron en Veracruz con la cuota de género... en la lista de candidatos a diputados locales por la vía pluri.
Y más porque ninguna de las mujeres privilegiadas hará campaña, ni gastará un solo centavo, ni se expondrá a una derrota.
Luis Velázquez
En todo caso, algunas quedarían fuera porque van, digamos, en los últimos números de la escala electoral.
Desde luego, el santo dedazo de las elites políticas se impuso, encima, lejos, de la militancia, que una vez fue menospreciada.
Pero, bueno, desde 450 años antes de Cristo tal cual ha sido el reparto de los bienes del poder y ni modo que ahora en Veracruz sea diferente, y más si se considera que así las cosas han funcionado por lo siglos de los siglos.
En el PRI, las candidatas pluris son en orden numérico descendente, Regina Vázquez Saut, Luisa íngela Soto Maldonado, Janet García Cruz, Alicia González Cerecedo y Sandra Angélica Soto Rodríguez. Cinco en total.
En el PAN, Cinthya Lobato Calderón, Teresita Zucolotto Feito, María del Rosario Guzmán Avilés y Gabriela Reva Ayón. Cuatro.
En el PRD, María Adela Escamilla Moreno, Yeimy Dolores Martínez, Alba San Martín Hernández, Yazmín de los íngeles Copete Zapot, Anabel Jongitud Solís, Elda Quintero Mármol Díaz, Rosalba Rodríguez, Concepción Danae Vázquez y Olivia Macario Ramírez. Ocho.
En el PVEM, Patricia Guadalupe Peña Recio, Dominga Xóchilt Tress, Dalia Pérez Castañeda, Graciela Ramírez López, Dulce Natalia Lugo Jiménez, Arantxazu Belda Ladrón de Guevara, María del Rocío Sousa Oliva, Karla Barradas Pérez y Mónica Macías Segura. Nueve.
Y en MORENA, Lourdes García González, Patricia Rodríguez Cueto, Idalia Salazar Hernández, Consuelo Ocampo Cano, Yolanda Ahuja Cristóbal, Rosalinda Galindo Silva y Maribel Hipólito Cárdenas. Siete, más seis candidatos externos que serán definidos con el dedazo de Cuitláhuac García Jiménez, y quien podría, digamos, incluir a más mujeres.
BALAUSTRADAS: Tal cual, el PRI nominó a cinco mujeres para el escaño pluri. El PAN, cuatro. El PRD, ocho. El PVEM, nueve. Y MORENA, siete, por lo pronto.
Es decir, y de entrada, el Partido Verde privilegió más la cuota de género, aun cuando en su lista lleva a varias militantes del PRI, lo que expresa, por un lado, que el Verde es una filial del PRI, y segundo, que todo lo que puede… negocia, pues sin duda habrían obtenido canonjías extras por prestarse a tal desdibujamiento partidista.
Luego quedó el PRD, un partido descarrilado, que solo ha prestado la membresía al PAN para la alianza electoral por la gubernatura, pero con un bajísimo perfil. Bastaría recordar que de los 212 Ayuntamientos solo tienen 33 presidencias municipales y un solo diputado federal. Ni un Senador, como en otro tiempo lo fuera, por ejemplo, Arturo Hérviz, curul que dejaron perder dada las luchas intestinas, más que por el servicio público, por la ambición económica.
Y si alguna duda existiera en el primer lugar de la lista pluri va Sergio Rodríguez Cortés, ex alcalde de Ciudad Mendoza y ex presidente del CDE, tiempo aquel cuando el góber fogoso lo sedujo con prebendas, a tal grado que todo el mundo le llamaba el PRD rojo.
Un PRD rojo que no obstante llevó al candidato de la alianza PRD y PAN a gobernador, Miguel íngel Yunes Linares a exclamar que Sergio Rodríguez es el mayor demócrata de la izquierda en Veracruz.
Por el contrario, el PAN nominó a 4 mujeres en su lista pluri, entre ellas, a Cynthya Lobato, quien ya fue diputada local, y que ahora, así será su fuerza social y política en Xalapa, va de pluri en segundo lugar, pero también de uni, es decir, doblemente amarrada.
El PRI nombró a cinco mujeres, con lo que, digamos, cumplió con la ley Peña Nieto de que la mitad de las candidaturas a un puesto de elección popular han de ser para mujeres y la mitad para hombres.
ESCALERAS: Por desgracia, los hombres han desacreditado la política con tantos escándalos morales, pero también con el enriquecimiento ilícito.
Incluso, la encuestadora Latinobarómetro ubica a los políticos en el mismo nivel de desconfianza ciudadana que los policías, y oh paradoja, que los reporteros.
Por eso, la gran esperanza para que las mujeres reviertan tal tendencia histórica y apliquen un sentido social al ejercicio del poder público en un Veracruz, por ejemplo, donde según el CONEVAL, seis de cada diez habitantes están atrapados y sin salida en la miseria y la pobreza, en tanto un millón y medio solo hacen dos comidas al día, y mal comidas, dada la estrechez económica de sus días y noches.
Además, la investigadora Patricia Ponce ha documentado que Veracruz se ha convertido en el primer lugar nacional en producción y exportación de trabajadoras sexuales, medida extrema para llevar el itacate a casa.
Sin contar, la migración a los campos agrícolas del Valle de San Quintín y a Estados Unidos.
Esperemos, pues, que las mujeres políticas signifiquen una lucecita en el largo y extenso túnel de la oscuridad social en el territorio jarocho.
Ya se verá, porque con todo y las diputadas en la LXIII Legislatura, Veracruz empeoró este sexenio, en que sólo en tres años aportamos medio millón más de pobres al rating nacional.