Desafuero de Yunes Linares
•Adolfo Mota, el operador
•A ver si les da tiempo...
PASAMANOS: En el Congreso de la Unión ya nadie recuerda la denuncia penal de la Auditoría Superior de la Federación en la PGR contra 19 duartistas por el destino oscuro de los recursos federales en el gobierno de Veracruz.
Luis Velázquez
También han olvidado la solicitud de juicio político en contra de Javier Duarte, JD, interpuesta por las bancadas del PAN, PRD y MORENA.
Menos recuerdan el par de denuncias penales de la rectora de la Universidad Veracruzana, Sara Ladrón, una federal y otra local, en contra de JD por la retención de los 2 mil 300 millones de pesos de los subsidios federal y estatal.
Y ni quién recuerde la denuncia penal del CEN del PAN en la Procuraduría General de Justicia de la Nación en contra de JD.
Ahora, la bancada priista en el Congreso federal está pendiente de una nueva agenda pública.
La ha expuesto en la pasarela el diputado federal, Adolfo Emilio Mota Hernández, por instrucciones de Javier Duarte para desaforar lo más pronto posible al panista Miguel íngel Yunes Linares.
Por un lado, la investigación sobre enriquecimiento ilícito.
Y, por el otro, el manejo de recursos ilícitos a partir de la denuncia penal de los diputados federales del PRI jarocho en contra del candidato aliancista del PAN y PRD al trono imperial y faraónico.
Según Motita, quien perdiera la contienda interna por la candidatura a la silla de su amigo y patrón, JD, también incluirán en la solicitud de desafuero los llamados Papeles de Panamá.
Y en un descuido la denuncia expuesta por Univision, la empresa televisa de Estados Unidos a la que según Yunes Linares el duartismo pagó 40 millones de pesos para lanzarse en su contra.
La guerra sucia del priismo llevada al Congreso de la Unión para asestar el penúltimo manotazo al Yunes azul con el presunto desafuero.
Ya se verá, entonces, si al priismo le da tiempo y espacio de aquí al 5 de junio para la resolución judicial y para el proceso de desafuero, o de lo contrario, solo queda como un fuego artificial de Motita, aquel que confesara a Javier Duarte que “un menosprecio de usted es peor que el desprecio de mi esposa”.
BALAUSTRADAS: La semana que termina ha sido indicativa para el Yunes azul.
Por ejemplo, de pronto, una parte de la prensa defeña ha expresado como una especie de “mano que mece la cuna” que entre Miguel íngel Yunes Linares y Héctor Yunes Landa se ha dado un empate técnico, luego de que durante varias semanas anteriores la misma prensa asegurara que el Yunes azul iba por delante hasta en 16 puntos.
Por ejemplo, de pronto, la prensa defeña redescubrió que Miguel íngel es un peligro para Veracruz, y a quien están rafagueando, y por tanto, han dejado de ocuparse de Javier Duarte con el mundo sórdido, revuelto y turbulento que ha creado durante cinco años y cinco meses de gobierno.
Por ejemplo, el archivo de la solicitud de juicio político de la bancada federal del PAN, PRD y MORENA en contra de Duarte, y en contraparte, el cabildeo de los diputados federales para desaforar a Yunes Linares.
Por ejemplo, el madrazo a los Yunes azules en Univisión, antecedido por los Papeles Panamá que en todo caso se trató de una investigación periodística de cien reporteros del mundo aglutinados en 360 medios, pero que al mismo tiempo, cayó como “anillo al dedo” en la campaña electoral por la gubernatura jarocha.
Tal significa, dice el politólogo Carlos Ronzón Verónica, que la mano del CEN del PRI y Los Pinos se están metiendo con todo en Veracruz.
Muchas cositas más podrían suceder en las cuatro semanas pendientes de las campañas.
ESCALERAS: El duartismo ha conferido a Motita, discípulo del senador Emilio Gamboa Patrón, el cabildeo del desafuero de Miguel íngel como diputado federal.
Envalentonado, porque cree tener el destino de Veracruz en sus manos, Motita ha anunciado que solicitará a la secretaría de Relaciones Exteriores intervenga ante del Departamento de Justicia de Estados Unidos “para que el presidente Barack Obama informe sobre el estatus migratorio de Miguel íngel y Omar Yunes, quienes preservan en aquel país una importante empresa inmobiliaria”. (La Jornada nacional, Enrique Méndez y Roberto Garduño, 29 de abril, 2016)
Incluso, él mismo Motita, bajo sospecha de riqueza inexplicable (su mansión en el Frac. Club de Golf de Xalapa y su depa de lujo en Boca del Río, entre otras cositas), declaró lo siguiente al par de reporteros:
“De impoluto Miguel íngel Yunes Linares no tiene nada. Es un personaje señalado en distintos momentos de su carrera política y con antecedentes ominosos. No es un buen ciudadano”.
Es decir, el priismo está utilizando al mayor número de sus actores políticos, sociales y económicos para descarrilar al Yunes azul.
Los días de la campaña se están recrudeciendo, como resulta lógico y normal en todas las jornadas cívicas del mundo. Quizá con más intensidad que en el año 2010. Entonces, Miguel íngel perdió ante Javier Duarte. Ya se verá en este trance cuando enfrenta la más frenética de sus batallas frente a su primo hermano.
Por ahora, y si creemos a la encuesta, hay un empate técnico. Es decir, nada para nadie. La moneda electoral sigue dando vueltas en el aire cívico.
Y, por tanto, la única estrategia es multiplicar el lodo y el cochinero para ver si alguna parte asesta un campanazo con un asunto sórdido que sorprenda a la población electoral y la deje sin aliente, y por añadidura, descarrile por completo al otro.