Suyo fue el destino social de los demás. Suyo fueron los poderes Legislativo y Judicial. Suya fue la SEFIPLAN. Suya fue la policí­a. Suyo fue el partido tricolor. Suyos fueron los cargos públicos que a la fecha los ha cambiado en 84 ocasiones. Suya fue parte de la prensa.
Tal cual, si el góber fogoso arrasó con el Instituto de Pensiones, IPE, entre otras instituciones y dependencias, también JD hizo y deshizo, hace y deshace.
Y ahora, simple y llanamente, Javier Duarte está descapitalizando al IPE.
Por ejemplo, de una Reserva Técnica que era de 5 mil millones de pesos, ahora está en unos 1,900 millones de pesos.
Y lo peor: todo indica que su único objetivo es dejarla en cero.
La Reserva Técnica del IPE, por ejemplo, equivale, entre otras cositas, a un fondo de ahorro que una familia tiene, pudiera tener, digamos, para emergencias.
La muerte de un familiar. El secuestro de un hijo en los tiempos revueltos y turbulentos de Veracruz. Una operación quirúrgica.
Y como la secretarí­a de Finanzas y Planeación, que ya lleva seis titulares, todos complacientes, salvo Salvador Manzur que fuera despedido por culpa de su lengua pizpireta, está en ceros, la SEFIPLAN de Antonio Gómez Pelegrí­n está tomando dinerito de la Reserva Técnica del IPE para cubrir urgencias, digamos, oficiales.
Por ejemplo:
Si antes, mucho antes, el gobierno de Veracruz pagaba las prestaciones sociales establecidas en el IPE de sus propios recursos, ahora, sin rendir cuentas a nadie, SEFIPLAN dispone de la Reserva Técnica.
Es decir, aplicando la llamada “Operación licuadora” que consiste según los teóricos de la polí­tica económica, en desviar los recursos públicos a otros programas, a otras regiones, quizá a otros bolsillos, acaso al jineteo bursátil.
Así­, y desde hace ratito, los 5 mil millones de pesos han sido ordeñados una y otra y otra y otra vez y al momento sólo quedan 1,900 millones.
Pero además, sin escrúpulo alguno. Sin remordimiento de conciencias. El valemadrismo en su plenitud.

PERMISO PARA EL ATRACO

Lo peor del asunto es que mientras por un lado la Reserva Técnica es mutilada, por el otro, SEFIPLAN ni paga abonitos al capital, ni menos, mucho menos, intereses.
Por eso los llamados Copipes, que integran una parte de los 22 mil pensionados, ha puesto el í­ndice en la llaga purulenta, advirtiendo que el IPE es descapitalizado.
Pero su denuncia ha caí­do en el desierto, en el páramo, en el yermo, y ningún diputado local ni federal ni el ORFIS ni la Comisión de Vigilancia del Congreso, a cargo, por cierto, de un exconvicto del penal de Topo Chico, Nuevo León, ha servido de resonancia para detener el atraco.
Lo peor es lo siguiente:
Javier Duarte está disponiendo de la Reserva Técnica con la anuencia total de la SEFIPLAN, que está representada en el IPE.
Pero más aún, con el visto bueno del Consejo de Administración, integrado, entre otros, por un sexteto de lí­deres sindicales, entre ellos, el impoluto, que se dice, Enrique Levet Gorozpe, desde hace dos décadas dirigente del FESAPAUV, que aglutina a los 6 mil, 7 mil profes de la Universidad Veracruzana.
Es decir, se trata de un saqueo aprobado por quienes en la utopí­a social han de evitarlo.
Y mientras los siete candidatos a la mini/gubernatura andan con el sonsonete trillado de que en Veracruz hay inseguridad e impunidad, nadie se ocupa, en primera instancia, de la denuncia.
Pero más aún, de poner un alto, digamos, hasta con una denuncia penal en contra del duartismo por la descapitalización del IPE, y que constituye un paso más al descarrilamiento de la seguridad social en Veracruz.

LOS CÓMPLICES

La sórdida historia de la deuda pública en Veracruz resulta inverosí­mil.
Por ejemplo, lo insólito: JD le debe pago millonario a los dueños de florerí­as en Xalapa quienes en abonos le otorgaron cientos de coronas de flores para los muertos que han pasado a otra vida.
Por ejemplo, lo insólito: JD le debe a los músicos que han amenizado eventos oficiales, a tal grado que la semana anterior se plantaron en la escalinata de la Catedral y le cantaron una cancioncita, a ritmo de salsa, en una de cuyas estrofas repite “Duarte no paga, Duarte no paga”.
Por ejemplo, lo insólito: Liconsa acaba de suspender la dotación de leche a los niños pobres porque JD le debe 15 millones de pesos.
Por ejemplo, lo insólito: la semana anterior los burócratas de la secretarí­a de Desarrollo Agropecuario se plantaron al lí­der de “Los bembones”, Ramón Ferrari Pardiño, reclamando, ni más ni menos, el pago de la quincena.
Y todaví­a de ñapa, el saqueo silencioso, cien por ciento silencioso, de la Reserva Técnica.
Entonces, ¿pa”™qué fregaos están el Consejo de Administración del IPE, el Órgano de Fiscalización Superior, y la Comisión de Vigilancia del Congreso, y la Contralorí­a, y la SEFIPLAN?
Nadie quisiera pensar que todos ellos son cómplices de los trastupijes duartianos.

ENTÉRESE RíPIDO

CNC jarocha, irritada con el PRI. Bloquean candidatos a curules. Héctor Yunes, callado.
Si Héctor Yunes es el candidato priista a mini, ¿por qué bloquean a CNC de Molina Palacios?
Para Héctor Yunes, más importante cacique Callejas que CNC de Molina Palacios.
Si PRI Veracruz sigue bloqueando a CNC se irá a otro partido. Rudeza innecesaria.
Como siempre, PRI jarocho, secuestrado por tribus, igual que PRD, igual que PAN.
Duda. ¿A poco puede más Flores Espinoza que CNC de Molina Palacios?
Rezan priistas por descarrilar a Yunes Linares. Saben que va adelante.
Si Yunes Linares llega a palacio, muchos priistas a la cárcel. Por eso, todos temerosos.
Rechaza Javier Duarte riqueza sexenal. Nadie le cree. Yunes azul enlista a sus prestanombres.
Solo faltó que Javier Duarte dijera, como Peña Nieto, que sus casitas son donaciones.
Yunes Linares denuncia a Javier Duarte. Y Duarte saca denuncia vs su hijo Omar.
Versiones: Javier Duarte juega con Bueno, Cuitláhuac y Alba Leonila. De ñapa, Héctor Yunes.
"Yo no robo ni cobro moches" dice Armando Méndez. ¿Ha tenido cargos para ordeñar la vaca?
Inició Cuitláhuac Garcí­a campaña con una botarga. Botargas no votan.
Innecesario que Héctor Yunes pida a Amadreo reconsiderar a CNC. Que ordene.
Polis de Papantla, acusados de desaparición forzada. Igual que en Tierra Blanca. El Veracruz duartiano.