En la Cuenca del Papaloapan es el polí­tico más conocido y aceptado por tirios y troyanos, de tal manera que significa un vaso comunicante, “puente de plata” como él suele referir cuando analiza la vida pública…Pues bien, Mario Tejeda asegura que Patricio Chirinos Calero y Agustí­n Acosta Lagunes han sido los dos mejores gobernadores en la historia polí­tica, si partimos como tope histórico 1968, el año que estremeciera a México y al resto del mundo con el movimiento estudiantil… Y su visión de Estado lo enmarca en los siguientes principios universales… 1) Acosta y Chirinos sanearon las arcas del gobierno de Veracruz, desapareciendo por completo la deuda pública, que dejaron en cero, al revés, por ejemplo, del desastre administrativo, el colapso financiero y la corrupción polí­tica de la que habla el senador Pepe Yunes en el Veracruz de hoy… Claro, tanto Acosta como Chirinos eran economistas de vocación, sin ningún Para que haya control del gasto público sólo basta la voluntad expresa y firme del gobernador: Mario Tejeda Tejeda doctorado en la materia; pero conscientes y seguros que sólo con rigor en las finanzas públicas flota el barco oficial…

BALAUSTRADAS: 2) Uno y otro exgobernador dejaron, además, un fondo millonario al sucesor en la secretarí­a de Finanzas y Planeación… Por ejemplo, Chirinos Calero dejó 2,700 millones de pesos en caja a Miguel Alemán Velasco, quien en un dos por tres los desapareció… Y Acosta Lagunes dejó a Fernando Gutiérrez Barrios 14 mil millones de pesos en caja, y quien también los desapareció en un dos por tres…Incluso, Acosta dejó a Gutiérrez Barrios un número singular de obra pública sin inaugurar que don Fernando se dio el gusto en nombre de la revolución hecha gobierno, toda vez que a don Agustí­n jamás le importaba cortar el listón, pues lo importante, afirmaba, era el servicio social a la comunidad… 3) Desde la primera semana del sexenio, Acosta y Chirinos redujeron el gasto público, sin contemplaciones, restricciones ni concesiones, digamos, al primero, segundo, tercer cí­rculo del poder, y menos, mucho menos a las barbies de entonces, que su destino era la intimidad de una alcoba… Un dí­a, por ejemplo, cuenta Mario Tejeda, en el aeropuerto Heriberto Jara, don Agustí­n llegó solo, como siempre andaba, más que con el chofer, para viajar a la ciudad de México… Y ahí­ se topó con varios miembros del gabinete que, oh paradoja, también viajaban al DF…Molesto, iracundo, don Agustí­n se encerró en un privado del aeropuerto y fue llamando uno a uno para preguntarle las razones de su viaje… Y a varios los regresó, argumentando la insustancialidad de sus motivos… El rigor económico de Acosta Lagunes llegaba, incluso, a la coderí­a… 4) Tanto Acosta como Chirinos ejercí­an una drástica, inalterable vigilancia sobre el gasto público… Pero también en una sistemática lucha en contra de la corrupción, pues las tentaciones económicas flaquean por completo a los polí­ticos… Así­, don Agustí­n, por ejemplo, despidió a unos 50 funcionarios a quienes les comprobaron haber ordeñado la vaca… Y eso que entonces, ni existí­a la Contralorí­a del gobierno de Veracruz ni tampoco el monstruoso aparato burocrático del ORFIS, al que hoy la conseja popular ha bautizado con el nombre de Órgano de Simulación Fiscal, pues sólo aplica la ley a los alcaldes de municipios indí­genas y rurales y se dobla ante los alcaldes urbanos que contratan a un quí­mico contable para ajustar sus cuentas y evadir la aplicación de la ley…

ESCALERAS: 5) Quizá don Agustí­n fue más drástico en el gasto público que Chirinos para evitar, digamos, gastos innecesarios… Un dí­a, por ejemplo, Mario Tejeda, su director de Industria y Comercio, le pidió le cambiara de auto porque el antecesor en el sexenio anterior se lo habí­a dejado en calidad de bulto, inservible, que a cada rato se descomponí­a… Entonces, sin rodeos, cara a cara, don Agustí­n le contestó de la siguiente manera: Sólo que te dé el mí­o… Y ni hablar, ahí­ quedaron las ganas de Mario Tejeda de estrenar automóvil, pues entonces la orden del gobernador era la movilidad de los secretarios y jefes de oficina para checar el estado de cosas en Veracruz en el terreno de los hechos… Acosta Lagunes tuvo sólo dos secretarios de Finanzas, tesoreros entonces, a saber: Carlos Gutiérrez de Velasco y José Luis Pérez Chow… Y tení­a a una gran operadora administrativa como jefa del Departamento de Control de Finanzas, a saber, la señora Teresa Pantoja, que vigilaba con lupa el gasto público… Patricio Chirinos tuvo como tesorero a su amigo Guillermo Rivera, quien falleciera en un accidente automovilí­stico en unas vacaciones en España… Pero además, Memo Rivera tení­a como auxiliares implacables a Felipe González de Aragón y a Marcos González… Y, bueno, llegó Miguel Alemán Velasco de gobernador y de inmediato aumentaron los sueldos al gabinete legal y ampliado, aumentó la burocracia y Veracruz empezó a joderse hasta el momento actual en que sigue jodiéndose…Mario Tejeda resume así­ aquella doble experiencia que tuvo: para que haya control del gasto público sólo basta la voluntad de cada gobernador…