El municipio serrano de Soledad Atzompa, ubicado entre los grandes cerros de Orizaba, vive una lucha desde hace varios años por ser tomados en cuenta por los gobiernos estatales y federales que vienen y van.

Fieles a sus costumbres y tradiciones, los pobladores en su mayorí­a indí­genas, han decidido unirse no solo en armas para defender sus tierras, sino para exigir un alto a los rezagos sociales.

El poco mantenimiento en las escuelas, las oportunidades mí­nimas de llegar a la educación superior, la falta de espacios culturales, los maltrechos caminos vecinales y la ausencia de clí­nicas de salud marginan a los habitantes.

El hospital regalado

Cuando algún vecino de Soledad Atzompa y sus 40 comunidades se enferma tiene pocas opciones; tratarse con la medicina tradicional de sus ancestros, viajar algún hospital urbano o aguantarse.

El municipio cuenta con un par de pequeñas clí­nicas que sirven para atender a sus más de 39 mil habitantes, las cuales no se dan abasto por falta de medicamentos y personal capacitado.

Ante el cansancio de no ser escuchados por los gobernadores y su gabinete, los pobladores unidos decidieron actuar y formar un comité para poder mejorar sus condiciones humanas.

Fue así­ que cada habitante cooperó con 400 pesos de su propio bolsillo para comprar un terreno dentro del municipio y donarlo a la Secretarí­a de Salud (SS) para que les cumpliera con el hospital.

“Soledad Atzompa se siente ofendido por las promesas incumplidas del Gobierno del Estado, sobre todo con la construcción del nocosomio, pues carecemos de esta necesidad.

“Yo creo que el gobierno de Duarte como para calmarnos, inició con la obra pero la están haciendo de mala calidad”, dijo Armando González Antonio Agente Municipal de la Comunidad de Linda Vista.

Para poder construirlo, el Gobierno de Javier Duarte les impuso las condiciones de que además de donarlo, debí­an pavimentarles un acceso y darle suministro eléctrico para iniciar la obra.

Pese a haber cubierto los requisitos impuestos y entregar el terreno ante el Congreso del Estado para que la SS iniciara las obras, estas aún permanecen completamente estancadas.

“El entonces Secretario de Salud, Juan Antonio Nemi Dib se comprometió durante los bloqueos carreteros que hicimos la noche del 29 de septiembre del año pasado a dar inicio con la construcción.

“También el propio Gobernador Javier Duarte se comprometió formalmente a venir a Soledad Atzompa a poner la primer piedra en el lugar que hoy vemos se está cayendo”, refirió el alcalde.

El Gobierno Estatal únicamente marcó el terreno e inició con un par de bardas para muros de contención, las cuales quedaron de mala calidad, pues a menos de un año de su construcción, se caen a pedazos.

Las 40 comunidades exigen el cumplimiento de esta obra, pues señalaron que enfermos y madres a punto de dar a luz, han fallecido a lo largo de los años mientras viajaban a otros hospitales.

Educación a medias

Las escuelas en Soledad Atzompa brillan por sus carencias, pues los recursos tanto federales como estatales designados a la educación de niños y jóvenes muchas veces no llega o es insuficiente.

Tal es el caso del Centro del Niño Indí­gena ubicado en la comunidad de Atzompa, donde decenas de infantes viven entre semana lejos de sus pueblos y familias para recibir educación.

Este albergue cuenta con 22 literas en un pequeño cuarto hasta donde los 40 niños de las distintas comunidades viajan y se hospedan de lunes a viernes, pues difí­cilmente pueden ir y venir de su casa a la escuela.

“La verdad yo siento que no nos toman muy en cuenta y es una de nuestras principales inquietudes, tal vez han de pensar que solo porque somos indí­genas, no sabemos o que tal vez no nos damos cuenta.

“Quizás el gobierno piensa que no sabemos hablar el español y nos excluyen, pero si nos damos cuenta de las cosas y nos sentimos discriminados” exclamó, Gemima López, madre de familia.

El año pasado la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indí­genas instaló agua potable en Atzompa y en este albergue, no obstante la Comisión Federal de Electricidad los tiene con diablitos para surtirse de suministro eléctrico.

Los más infantes más pequeños que inician sus estudios en el Jardí­n de Niños Benito Juárez corren un riesgo constante debido a la falta de condiciones para garantizar su seguridad.

Ubicado en lo alto de un cerro, al pie de la carretera, el kí­nder carece de una malla perimetral que pudiera impedir que alguno de los niños que juega en el patio caiga hacia la carretera y sea atropellado.

Así­ mismo, en esta escuelita los más pequeños aprenden tanto en español como en náhuatl, pues tanto maestros como padres de familia consideran importante que conserven siempre sus raí­ces.

La zona cuenta con apenas un telebachillerato para que los jóvenes inicien su educación superior, no obstante, el internet en la zona es sumamente deficiente y las computadoras pocas.

Viajar entre montañas

Pese a que la carretera para ingresar a Soledad Atzompa desde Orizaba, Nogales o Ciudad Mendoza se encuentra en buenas condiciones, los caminos vecinales en la sierra son deficientes.

La serpenteante carretera ofrece una impresionante vista panorámica de todo el valle de Orizaba en cualquiera de sus puntos, no obstante aún carece de señalamientos en algunos de estos.

Vecinos señalaron que desde la última reunión, las autoridades les prometieron pavimentar un camino de 6 kilómetros que va hacia Atexcalco, el cual es vital para llegar a otros muicipios.

Pese a que la rehabilitación del camino serí­a en tres etapas de dos kilómetros cada una, al dí­a de hoy no han pavimentado un solo metro de dicho sendero, lo cual dificulta sus traslados.

Por último, manifestaron que algunos tramos de la carretera de entrada y salida requieren de un reencarpetamiento debido a que muchas veces sufren deslaves por las constantes lluvias.