cargando

En twitter:

A Mil por Hora
Sábado 22 noviembre, 2014

Duarte habla de democracia y policí­a reprime

El gobernador proclama la certeza jurí­dica. El alcalde de Orizaba sigue utilizando la policí­a para intimidar a los activistas. Y en Pánuco priistas se despedazan por un cacicazgo que atenta contra los valores democráticos

Luis Velázquez

  • Javier Duarte. Diálogo y acuerdo

  • Juan Manuel Diez. Policía represiva

  • Ricardo García Guzmán. Lucha caciquil

En nombre de la democracia, el gobernador de Veracruz se corta las venas y dice en el segundo informe del presidente del Tribunal Electoral:

“Veracruz se funda en los valores democráticos”.

“Veracruz, con el Tribunal Electoral, es ejemplo de certeza y seguridad jurí­dica”.

“Veracruz cuenta hoy (hoy hoy) con sólidas instituciones que hacen valer la ley y son garantes de la voluntad de ciudadanos en una democracia de resultados”.

“En Veracruz hay una cultura de legalidad, con la fortaleza del diálogo, el acuerdo y el entendimiento”.

“En Veracruz se hace de la pluralidad… una fortaleza para impulsar el progreso”.

“En Veracruz la democracia no es asunto de partidos, sino de ciudadanos conscientes de que en la libertad a elegir no se admite la violación de los valores, los principios y las reglas”.

“Veracruz es baluarte de la democracia en México, una democracia más firme y confiable, donde se respeta el Estado de Derecho y busca el programa compartido”.

INTIMIDAN POLICíAS ACTIVISTAS

Pues bien, ese mismo dí­a, miércoles 19 de noviembre, 2014, en Orizaba, sucedió lo siguiente: en el parque central de Orizaba un grupo de activistas sociales mantení­an un plantón por Ayotzinapa.

Entonces, elementos de la policí­a se lanzaron en contra de ellos con “acciones represivas y acoso”, en tanto acusaron al director de Gobernación municipal, Juan Ramón Heredia, “de ordenar la represión y las amenazan de muerte”.

Incluso, los policí­as “nos dijeron que nos iban a levantar para desaparecernos” (La jornada Veracruz, Fernando Inés Carmona).

“Llegaron en la madrugada y empezaron a gritarnos: putos, putos. Y no conformes nos advirtieron que nos levantarí­an”.

En contraparte, los activistas hablaron de un doble, triple discurso: “El secretario del Ayuntamiento, Christian Pérez Espinoza, nos confirmó que no tendrí­amos ningún problema. Que nadie nos iba a molestar”.

Dos dí­as anteriores al plantón, la policí­a detuvo a un alumno del CBTIS de Orizaba. “Lo acusaron de grafitear y faltas administrativas. El compañero pintaba leyendas en favor del movimiento de Ayotzinapa”.

“Nos quieren intimidar y que disolvamos los movimientos sociales en Orizaba y en Veracruz”.

Así­ pues, en Xalapa, con el góber, un discurso, ante el Tribunal Electoral. Y en Orizaba, otro.

Algún quisquilloso dirá que mientras Duarte es el gobierno estatal, en Orizaba la policí­a municipal, dependiente del alcalde Juan Manuel Diez Francos, con fama pública de represivo, fue la autora del acoso y la intimidación.

Ambos, no obstante, son militantes y gobiernos priistas. El par es autoridad. Los dos ejercen el poder y lo menos que el ciudadano espera es coincidencia en el mando.

PELEA PRIISTA POR UN CACICAZGO

En el otro lado de la moneda habrí­a de referir, por ejemplo, los carteles aparecidos en los árboles en la ví­a pública de Pánuco, en el norte de Veracruz, con amenazas de muerte al cacique local, que aspira a regional, el contralor Ricardo Garcí­a Guzmán, y su hijo, el presidente municipal y exdiputado local.

Pero, bueno, en Pánuco, que por tanta violencia la LXIII Legislatura está a punto de cambiarle de nombre por el de “Pánico”, hay una lucha interna aldeana y pueblerina por el control del poder.

En un lado del ring, los Ricardos Garcí­a. En el otro, la diputada federal Zita Pazzi, directora del DIF con Fidel Herrera.

En el otro, Guillermo Dí­az Gea, quien fuera, parece, desplazado como cacique por el contralor duartista.

Y en el otro, Manuel de León Maza, apodado “La leona dormida” que también sueña para él y sus hermanos con un cargo de elección popular, por ejemplo, ahorita, en la inmediatez, la curul federal.

Y por tanto, mientras en Pánuco/Pánico la batalla es caciquil, con lo que se lesiona toda voluntad democrática, en Orizaba fue una evidente intimidación y acoso policiaco que en nada enaltece la certeza y la seguridad jurí­dica que alardeó el gobernador en el Tribunal Electoral.

Por eso habrí­a de convocar una vez más la sentencia bí­blica de André Malraux, el escritor que fuera Ministro de Información y Cultura del presidente Charles de Gaulle: “Seamos serios, seamos serios” en la tarea de gobernar.

Más que serios, congruencia entre el decir y el hacer y el actuar y el operar, porque si Duarte proclama, digamos, su verdad democrática y los secretarios del gabinete y los alcaldes se van por la libre, entonces, la tarea de gobernar y alcanzar un destino superior para la población se vuelve un enredijo y un caos.


1 comentario(s)

Sergio Torres Marín 22 Nov, 2014 - 20:13
En estado donde no existe la división de poderes ....NO EXISTE LA DEMOCRACIA. ,

MUERA LA PARTIDOCRACIA!

Deja un comentario

Acerca del blog

Blog de noticias desde Veracruz.
Aquí, deseamos contar la historia de cada día.
Y cada día es un nuevo comienzo.
Y todos los días se empieza de cero...

Portal de noticias de Veracruz.