Muerto en vida
Raúl Díaz salió huyendo de la SEV de Motita. Mejor dicho, huyó de Motita, quien le decía “El Motita jarocho”. Y fue al PRI.
Pero desde entonces, ni sus luces. Cero perfil. En el ostracismo.
La muerte en vida. Muerte sin fin como el poema de José Goroztisa.