Sembrado de cadáveres campo en Veracruz
•Como en los viejos tiempos de Roque Spinoso Foglia, dos líderes campesinos más en la tierra jarocha asesinados, y ahora, arrojados en territorio oaxaqueño al más puro estilo de los carteles
•Isidro Alarcón y José Manuel Herrera, del ingenio La Margarita, perseguidos, rafagueados y ejecutados desde una motocicleta hasta con el tiro de gracia cerca de la comunidad “La Palma”
•Lista de dirigentes cañeros de Veracruz acribillados a partir del asesinato de Roque Spinoso Foglia de 120 tiros en el sexenio de Agustín Acosta Lagunes, auge de “La Sonora Matancera”
•Hecho curioso: en la mayoría de los casos ha sido en la elección de líderes de las Uniones Regionales de Cañeros y, en todos los casos, sin excepción, la impunidad de la Procuraduría de Justicia
El Piñero de la Cuenca.-Acatlán, Oaxaca.-Dos sujetos a bordo de motocicleta fueron perseguidos, rafagueados y ejecutados con el tiro de gracia en inmediaciones de la comunidad La Palma. El escenario que quedó fue trágico.
Los dos cuerpos ejecutados, inertes y tirados a un costado de la motocicleta. El conductor de la moto vestía playera clara, sport y un pantalón de mezclilla, mientras que su acompañante vestía una playera negra y pantalón de mezclilla color azul y una gorra beige.
Una llamada anónima avisó a las corporaciones policíacas de la existencia de los dos cadáveres por lo cual rápidamente se dirigieron al lugar de los hechos acompañando a personal ministerial, realizándose las diligencias correspondientes al levantamiento y traslado de los cadáveres.
Los dos occisos fueron identificados como Isidro Alarcón y Manuel Herrera, con domicilio, uno en la comunidad El Nanche y otro en Tierra Blanca, Veracruz. Las autoridades policíacas guardan fuerte hermetismo sin hacer un informe de los hechos, sin embargo, el cruento asesinato de los susodichos ha sido confirmado por pobladores.
Se estableció que José Manuel Herrera era jefe de un grupo de cañeros, presuntamente del Ingenio La Margarita, y se sabe que estaba por entregarle el cargo a Isidro Alarcón.
Finalmente se espera que familiares reclamen los cadáveres, con lo cual las autoridades procedan a entregarlos y se les dé cristiana sepultura.
Sembrado de crímenes impunes campo cañero en Veracruz
•En 1984, asesinan a Roque Spinoso Foglia, dirigente nacional de cañeros, y dos primos más
•Muere de 500 balazos comandante que había ejecutado a líder del ingenio La Constancia
•Rafaguean a los hermanos Rafael y Sixto Díaz Pérez, de la factoría azucarera El Potrero
•Jueves 29, 3, 2012. 3 am. En Lerdo de Tejeda matan a líder sindical del ingenio San Pedro
Luis Velázquez
31 de marzo de 2012
3 de la mañana. Madrugada del jueves 29 de marzo. Colonia San Rafael. Lerdo de Tejada. Tres encapuchados entran a la vivienda del líder sindicato independiente del ingenio San Pedro. Teodoro Vázquez Pacheco. Y se van hasta la recámara, donde el dirigente descansa con su esposa, Francisca Salinas González, de 55 años.
El trío de sicarios jalonea al líder sindical. Lo saca de la recámara y lleva a la sala. Ahí lo matan de un balazo en la sien.
Y huyen… trepados en la camioneta Dodge tipo Durango, color arena, placas YHN-1651, propiedad del líder.
Más tarde, la policía de la AVI llega a casa y pregunta a la viuda si tenía enemigos. La viuda nada sabe. Guarda silencio. Calla (Notiver, 30, 3, 2012).
Así, se ha consumado, en víspera del inicio de las campañas electorales para el Congreso federal y Los Pinos en Veracruz, el asesinato de un líder cañero más en Veracruz.
35 en total, a la fecha, según recuento en el periódico digital, crónicas del poder, del director César Vázquez Chagoya. Y de los cuales por ahora pueden documentarse trece.
Todos, y por desgracia, impunes.
Arde el campo cañero. Y más cuando con la industria cafetalera y la citricultura, la caña de azúcar significan el sostén de la economía en el Veracruz próspero, seguidos por las remesas de migrantes que en el año 2011 se tradujeron en mil 300 millones de dólares enviados por los paisanos en el otro lado, la mayoría originarios de los municipios de Actopan, Landero y Coss, Alto Lucero, Las Vigas, Alamo y Tantoyuca, según describe el economista de la UV, Rafael Arias Hernández.
5 de diciembre de 1969. Los cañeros inician una huelga de brazos caídos en el ingenio La Constancia. Los magnates azucareros (aquellos que fueran satanizados por Luis Echeverría ílvarez) les roban en el pesaje del producto. El líder Gilberto Aguirre Ramos encabeza el movimiento.
Y en respuesta, el comandante Juan Hernández Campillo y sus policías, asesinan a Gilberto Aguirre y dejan herido a su primo Belem Ramos, en un bar, frente al ingenio, cuando bebían una cerveza.
El hermanastro de Gilberto Aguirre Ramos se llama Tomás Sánchez Ramos, conocido como “Tomasín”. Toman el palacio. Un mes después, la gente de Tomasín embosca al comandante Juan Hernández. 500 tiros se rafaguean entre las partes. Muere el comandante. Tomasín se vuelve un héroe en la región cuenta Pedro Ibáñez en su libro “Dulce guanábana”.
1976. En los límites de Veracruz y Oaxaca se ubica el ingenio La Margarita, municipio de Acatlán de Pérez Figueroa. Cañeros de Veracruz abastecen a la factoría azucarera. El productor de caña, Rubén Hernández, es asesinado. Se desata entonces un baño de sangre. En la refriega también es ejecutado Evodio Vargas, quien estaba listo para suceder en el liderazgo a íngel Galicia Rosas, reelegido ya en una ocasión.
EL ASESINO DE ROQUE SPINOSO FOGLIA
25 de noviembre de 1984. Roque Spinoso Foglia es líder de la Unión Nacional de Cañeros. Roque llega a una fiesta al rancho “El relicario” acompañado de, entre otros, su primo Sergio Spinoso, delegado de Tránsito en Cardel; su primo César Spinoso Corral (padre de César Spinoso, oficial mayor de la secretaría de Educación, quien entonces tenía 11 años) y un tipo apodado “El ronco”.
Al término de la fiesta, de regreso a casa, el automóvil donde viajan es rafagueado con 120 balazos. Agustín Acosta Lagunes está en el cuarto año del sexenio.
Otra muerte más impune.
22 de mayo de 2007. Un comando asesina al dirigente cañero, Timoteo Gutiérrez, del ingenio El Refugio, y quien a su vez está señalado de haber ordenado la ejecución de otros productores ansiosos de su cargo.
Incluso, se habló entonces de un desfalco de 25 millones de pesos, dinero de los productores cañeros que traficaban en préstamos con altos intereses.
Los cañeros se inconforman, y de pronto, tres productores (Eusebio Baltazar Huerta, Paulino Moreno Flores y Gustavo Baltasar Martínez) son emboscados y ultimados con armas de alto poder.
En la fecha también es asesinado a la altura de la comunidad San José del Corral, en el camino de Córdoba a La Margarita, el químico José Alberto Méndez Reyes, asesor de Timoteo Gutiérrez, y quien exigió cuentas del (presunto) fraude a los cañeros.
La historia sangrienta va más allá del crimen de Timoteo, pues en el ajuste de cuentas también ejecutan a su madre y al guardaespaldas.
17 de agosto de 1991. Venustiano y íngel Lara Rico, productos cañeros del ingenio La Providencia, desaparecen. Ambos promovían el cambio de los cañeros al ingenio San Nicolás.
Sus restos fueron hallados dos años después en las fosas clandestinas de Toribio “El toro” Gargallo, en Ojo de Agua, municipio de Omealca, y quien en el sexenio de Fernando Gutiérrez Barrios se exiliara de Veracruz cuando los caciques Cirilo Vázquez Lagunes y los hermanos Justo y Roberto Cabrera y Luis Rivera Mendoza, de la sierra de Chicontepec y Huayocotla, fueran aprehendidos e ingresados a los penales de Allende, en el puerto jarocho, y Pacho Viejo.
En el cuatrienio de Dante Delgado, Toribio “El toro” Gargallo regresó a Córdoba, su centro de operaciones, y murió en un enfrentamiento con la policía.
6 de agosto de 1991. En Yanga, la CNOP, al mando entonces de Jorge Moreno Salinas (hoy secretario del CDE del PRI de Erick Lagos), inaugura una biblioteca. Y la ceremonia termina en una masacre.
Ahí son asesinados Rafael y Sixto Díaz Pérez, líderes de la Unión local de Productores de Caña de Azúcar en el ingenio El Potrero, el segundo más grande del mundo luego del ingenio San Cristóbal, en Cosamaloapan.
Sixto es asesinado en la cantina “La cueva”, ubicada en la contra esquina del palacio municipal de Yanga, en tanto, Rafael, quien se lustraba los zapatos en el parque central, escucha el rafagueo, corre al lugar de los hechos y es ejecutado.
Barandal
•Policías desaparecidos
•Cañeros asesinados
•Todos, en la impunidad
17 de febrero de 2013
Luis Velázquez
PASAMANO: el 10 de enero ocho policías de Úrsulo Galván fueron “levantados y desaparecidos”, y no obstante las marchas de las familias, un mes y siete días después, ninguna pista, ninguna señal, ningún mensaje… Incluso, el secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez, dijo al mundo que los buscaban “por aire, tierra y mar”, y nada… Peor tantito. Los parientes han suspendido la protesta social, única que puede motivar a la clase gobernante para dar resultados… Decenas de versiones se han construido alrededor como parte del lenguaje popular… Desde que la mitad de los ocho polis desaparecidos estaban ligados con los carteles hasta que desde hace un ratito, la región se ha convertido en prioridad para los señores de la droga y la vida se ha vuelto un infierno cotidiano… De algún modo se repite la misma historia que en otras latitudes de norte a sur de Veracruz… Por ejemplo, en Tuxpan, los marinos se llevaron a siete policías acusados del asesinato de un marino que apareció flotando en el río y nunca, jamás, se ha conocido el desenlace… En Poza Rica, las fuerzas armadas se llevaron cinco policías acusados de amistades peligrosas y tampoco nunca se ha sabido el desenlace… De Peñuela se llevaron otros siete policías, acusados de haber plagiado a un profesor del SNTE y entregar a los cárteles; ningún boletín para conocer su destino… De Fortín se llevaron tres policías señalados de nexos con los narcos y tampoco se ha conocido su paradero… De Cosamaloapan se llevaron 17 policías (dos, tres de ellos, sacados a la fuerza de la casa del alcalde) y al momento se ignora su destino… De Tierra Blanca se llevaron hasta el comandante y de igual manera, el silencio… Y de Tres Valles se llevaron a nueve policías, incluido el jefe policiaco; el silencio como única respuesta oficial…
BALAUSTRADAS: ahora, la desaparición de los ocho policías de Úrsulo Galván está pendiente y causa demasiado, excesivo ruido… Los familiares bloquearon la carretera federal, efectuaron marchas en Cardel, en Xalapa y en el puerto jarocho, y nada… Peor tantito. Los familiares hablan que cuando ellos interpusieron la demanda en la agencia del Ministerio Público se toparon con parientes de otros ciudadanos desaparecidos… El colmo: ha sido público y notorio que en Cardel existía ¿existe? una casa de seguridad de los carteles, a un ladito del palacio municipal, y nunca, jamás, el alcalde tomó nota, quizá, acaso, el mismo fenómeno acontecido en el sexenio del gobernador Miguel Alemán Velasco, quien en la residencia en el fraccionamiento Costa de Oro, en Boca del Río, tenía de vecinos al capo José Alberto Quintero Meraz, preso hoy en Almoloya, y nunca, jamás, el súper secretario de Seguridad Pública, el diputado federal, Alejandro Montano Guzmán, lo registró… La esposa de uno de los ocho policías de Úrsulo Galván ha dicho lo siguiente: “Aquí está despareciendo gente y la autoridad nada hace”… Y sin embargo, a cada rato desde el poder cacarean el Veracruz seguro… Pero además, que ninguna entidad federativa como Veracruz representa tanta seguridad para la inversión privada… Lo peor del asunto es que de acuerdo con el llamado “Pacto de Colima”, los gobernadores se comprometieron cabildear en sus entidades federativas para retirar de los medios el tema de la violencia, desde los tiroteos y los muertitos hasta los secuestros, desapariciones y extorsiones… Buscan así crear una burbuja, un mundo de fantasía, una torre de marfil, entre la realidad imaginada y deseada y la realidad que la prensa escrita, hablada y digital construye cada día, simple y llanamente, narrando la historia de los hechos tal cual…
ESCALERAS: con el asunto de los policías sucede el mismo fenómeno que con los 36 líderes cañeros asesinados en un Veracruz con 22 ingenios azucareros… Apenas hace unos 15 días, uno más fue ejecutado, cuando la matanza inició en el año 1984, con el asesinato de 120 balazos del líder de la Unión Nacional de Cañeros, Roque Spinoso Foglia, y sus primos César Spinoso Corral (padre de Edgar Spinoso, oficial mayor de la Secretaría de Educación), y Sergio Spinoso, delegado de Tránsito en Cardel… Y en ningún caso la Procuraduría de Justicia ha sido eficiente ni eficaz… Peor tantito si se considera, por ejemplo, que luego del crimen de Gilberto Aguirre Ramos, líder en el ingenio La Constancia, ocurrido el 5 de diciembre de 1969, su medio hermano, Tomás Sánchez Ramos, conocido como el “Tomasín”, se hizo justicia por su propia mano y emboscó al comandante Juan Hernández Campillo, quien arrancara la vida a su carnal, en un bar en el ingenio La Constancia y en donde las partes se dispararon 500 tiros… Y no obstante, tanto homicidio en el campo cañero de Veracruz (la principal fuente de ingresos de la economía jarocha), han transcurrido 29 años en la opacidad, con los gobernadores Agustín Acosta Lagunes, Fernando Gutiérrez Barrios, Dante Delgado, Patricio Chirinos, Miguel Alemán, Fidel Herrera y Javier Duarte… Toda una historia, pues, de impunidad… El mismo riesgo se está corriendo con el caso de los ocho policías raptados en Úrsulo Galván…
Asesinan a otro líder cañero
23 de abril, 2014
Nombre. Claudio Pavón López.
Oficio. Agricultor y líder cañero.
Edad. 38 años.
Lugar. Tierra Blanca.
Hechos. A un ladito del ejido Paso Bobo los familiares hallaron su cuerpo sin vida.
Así, una vez más se enluta el campo cañero.
Caña amarga.
Caña amarga desde cuando en el sexenio de Agustín Acosta Lagunes asesinaron de 120 balazos al líder nacional de los cañeros, CNC, Roque Spinozo Foglia, y también a su primo hermano, César Spinozo, que lo acompañaba.
Y desde entonces a la fecha más de 20 líderes cañeros del estado de Veracruz han sido ejecutados y ningún crimen esclarecido.
Escenarios
•Crímenes impunes en Veracruz
•Ejecutan a políticos y dirigentes
•Alcaldes y líderes cañeros, en la mira
Luis Velázquez
13 de julio de 2012
I
El asesinato de políticos y figuras públicas en Veracruz ya entró a la cuenta nacional de crímenes, que a la fecha suman 70 mil con 20 mil desaparecidos según el poeta Javier Sicilia.
En Veracruz, por ejemplo, el 8 de noviembre del año 2010 fue ejecutado el alcalde electo de Rodríguez Clara, el panista Gregorio Barradas, exdiputado federal.
Semanas atrás fue secuestrada, torturada, asesinada y tirada a un lado del camino la presidenta municipal de Tlacojalpan, la panista Marisol Mora Cuevas, un pueblo modesto y sencillo de la Cuenca del Papaloapan, donde nadie pensaría ha florecido la delincuencia organizada.
El domingo 8 de junio fue secuestrado y asesinado el líder cañero del ingenio Constancia, Merced Ruiz Malpica, cuyo homicidio se agrega a una lista negra de dirigentes del campo que han terminado en la nota policiaca.
En el inter, dos alcaldes panistas, uno de Chinameca y otro de Las Minas, fueron desaforados por el Congreso local por sus (presuntas) ligas con el narcotráfico.
Y por fortuna, hasta ahora, han salvado la vida.
Tres políticos asesinados en Veracruz son bastantes, pues, se entiende, trabajan para el bien del pueblo.
Claro, si se considera el número de trabajadores de la información asesinados en Veracruz (9 en total), los políticos todavía tienen un camino a recorrer.
II
Nunca se ha sabido que la Procuraduría de Justicia, la Secretaría de Seguridad Pública, la AVI (Agencia Veracruzana de Investigaciones) haya detenido a los ejecutores físicos e intelectuales del fallido alcalde electo de Rodríguez Clara.
Nada tampoco se sabe del caso de la presidenta municipal de Tlacojalpan.
Como tampoco nada ha trascendido de indiciados y/o detenidos en el caso de los nueve reporteros y fotógrafos.
Bueno, mejor dicho, hay una excepción.
En el caso del reportero Noel López Olguín, secuestrado y asesinado en Jáltipan, el ejército detuvo de chiripa a un conductor que se pasó el semáforo en Coatzacoalcos y resultó que era un malandrín que había participado en el crimen del periodista.
Luego trascendió que había sido internado en el penal de Villa Aldama… y ahí desapareció.
Meses después ninguna declaración en la materia.
En el caso de Miguel íngel López Velasco y su familia, tampoco nada se conoce y eso que acaban de cumplir un año de la triple ejecución.
Y en el caso de la reportera Regina Martínez se habla de que hay dos arraigados.
Pero los días transcurren y sabrá Dios su estado penal.
Podría, entonces, reproducirse la misma circunstancia en el crimen del dirigente de la Unión Local de Productores de Caña en Veracruz, Merced Ruiz Malpica.
Es decir, la impunidad.
III
Una versión oficial cacarea que los cárteles ya se fueron de Veracruz y otra extraoficial habla de que, en todo caso, se habrían retirado, pero acaban de volver.
El caso es que sólo en el área conurbada Veracruz-Boca del Río, todos los días hay sobresaltos con más muertitos.
Desde ejecutados y abandonados en la vía pública hasta embolsados y ahorcados, como si los malosos continuaran aquí, en tierra fértil.
Bastaría referir la vivencia del sacerdote José Alejandro Solalinde, director del albergue “Hermanos en el camino”, ahora que ha retornado de su exilio voluntario y ha dicho que “la mayor parte del calvario de los migrantes… está ligada con la corrupción y el cacicazgo de los gobiernos priistas”.
Un calvario donde participan policías estatales y municipales, agentes del Instituto de Migración y sicarios.
Y es que los cárteles actúan en el secuestro de indocumentados como un negocio más, como de igual manera en la vida cotidiana en la producción, distribución y consumo de la droga, pasando por la cooptación de funcionarios públicos.
IV
El sado de muertitos en Veracruz se calcula, de manera conservadora, en unos 350 en los últimos 18 meses.
En el fuego cruzado han perdido la vida tanto malosos como elementos policiacos, soldados y marinos.
Pero también civiles.
Y cuando como ahora en la lista negra se incluyen a políticos, entonces, ningún ciudadano puede estar en paz.
Por eso es que los políticos jarochos andan custodiados hasta con 30, 40, 50 escoltas y se trasladan en helicópteros y aviones.
Okey.
Pero el ciudadano común que vive sus días y noches con sencillez también es importante.
Y de acuerdo con los teóricos criminalísticos, a mayor impunidad en los delitos más se reproducen, pues los homicidas saben que nada pasa.