Dos años buscando a su esposo
•Relato de una migrante de América Central a la CIDH
Felipe González, el relator de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, dio a conocer el informe sobre el paso de los migrantes de América Central por México, entre ellos, Veracruz.
He aquí un testimonio:
Alicia, guatemalteca, sostiene una foto ampliada de su esposo Miguel en su pecho, mientras clama información acerca de su paradero. Alicia relata que ella y su familia vivían humildemente en su finca en Guatemala. Poco más de 2 años atrás Alicia empezó a tener problemas de salud y tuvo que ser internada de urgencia en el hospital de su pueblo, donde fue operada de un problema vesicular. Tras 13 días de estar buscando dinero para el tratamiento de Alicia y sus gastos hospitalarios, Miguel le dijo a su esposa que iba a migrar a Estados Unidos para conseguir un trabajo y enviarle dinero para su tratamiento.
La última vez que Alicia tuvo noticias de Miguel fue el 11 de junio de 2009 cuando él se encontraba en Reynosa (Tamaulipas), a la espera de cruzar la frontera a Estados Unidos.
La última vez que Alicia y Miguel hablaron, él la llamó desde Reynosa; luego de hablarle brevemente, le dijo que tenía que colgar y le pidió que le llamara más tarde al hotel. Cuando ella llamó nuevamente, él ya no contestó. Primero un hombre le dijo que su marido estaba ahí, pero que llamara más tarde; después otra persona aseguró que Miguel ya se había ido. En su último intento, una mujer afirmó que su esposo aún se encontraba en el hotel, pero que no podía pasarle el teléfono, que en cuanto pudiera, él la llamaría.
Alicia pensó que algo andaba mal y que su marido podía haber sido secuestrado. El “coyote” con el que Miguel iba a cruzar le dijo a Alicia que él ya estaba en Texas.
Las versiones tan contradictorias la hicieron dudar. Alicia dijo que ella sabía que Miguel está vivo. Ella dijo que unos meses después de la última llamada de Miguel recibió un par de llamadas extrañas. En la primera llamada no habló nadie, pero ella
dijo que sabía que era él. La siguiente llamada llegó unos meses después y dijo que escuchaba las voces de algunas personas y cómo alguien le gritaba a otros hombres exigiéndoles que hicieran lo que él les ordenaba; tras unos minutos de escuchar las voces y los gritos, la comunicación se cortó.
A la fecha en la que el Relator recibió el testimonio de Alicia ella llevaba ya más de 2 años buscándolo. Alicia ha solicitado informes a la embajada de su país en México y en Estados Unidos y no ha obtenido mayor respuesta. Por ello, pidió un préstamo para unirse a la Caravana Paso a Paso hacia la Paz y seguir el recorrido de Miguel. Alicia y sus tres hijos esperan por el regreso de Miguel a Guatemala.*
*Relato del testimonio dado por una mujer guatemalteca al Relator sobre los Derechos de los Migrantes de la CIDH en Tierra Blanca (Veracruz), el 30 de julio de 2011.