sola ocasión, el siguiente, será ventilada y aprobada por las huestes priistas de la LXIII Legislatura comandadas por el cacique magisterial de todos los tiempos, Juan Nicolás Callejas Arroyo…Pero, además, el maestro advierte que tres años y ocho meses después, “Los niños infieles” fueron incapaces de posicionarse, y menos, mucho menos, consolidarse de cara a la sucesión, y ni modo, la jugada habrá sido cambiada… Así­, Érick Lagos Hernández, Jorge Carvallo Delfí­n, Adolfo Mota Hernández y Alberto Silva Ramos, con todo y sus í­nfulas, han quedado fuera, si acaso llegarán apenas, apenitas, a la curul federal… Y, por tanto, la única carta que ha quedado al góber ha sido Gerardo Buganza Salmerón, el panista que todos los cargos legislativos que tuviera (de diputado federal a senador y viceversa) fueran pluris, es decir, por dedazo, y quien nunca ha ganado una elección en las urnas; pero en cambio, chaqueteara a Miguel íngel Yunes Linares cuando perdió el dedazo panista y levantara la mano a Duarte camino a la gubernatura… Y, bueno, si alguna crisis de conciencia partidista tuviera, en los seis años del fidelismo y en el cuarto año del duartismo se la ha cicatrizado con prebendas y canonjí­as que nunca, jamás, imaginó…

BALAUSTRADAS: En el año 2004 Buganza perdió la elección de gobernador ante Fidel Herrera; pero en contraparte, en el sexenio del fogoso le fue bien… Por ejemplo, la fama pública consignó que tení­a la concesión de los vinos en los eventos públicos, dado que él mismo tiene sus viñedos que producen vinos embotellados con su nombre… También se habló de que le compraban las patrullas policiacas, donde el negocio en ningún momento es la patrulla en sí­ misma, es decir, el automóvil, sino el equipamiento… El número de bugancistas en un cargo “Los niños infieles” (Érick Lagos, Jorge Carvallo, Adolfo Mota y Alberto Silva) nunca levantaron en la encuesta camino a la candidatura a gobernador en el año 2016. Ahora, Gerardo Buganza es el plan “B” de Javier Duarte público también alcanzó una dimensión incalculable… Hubo quienes, oh paradoja, hasta aseguraban que vendí­a uniformes escolares, todo porque uno de los negocios familiares es tal… Así­, llegó al 2010, cuando perdió el dedazo del CEN del PAN para la candidatura a gobernador, y en un berrinche que resonó en el Opus Dei renunció al partido azul, luego de que desde allí­ lo ungieran varias veces diputado federal y senador… De pronto, Buga recibió como premio de consolación, excepcional, la Secretarí­a General de Gobierno y después la Secretarí­a de Infraestructura y Obra Pública; incluso, la ley fue modificada para convertirla en una súper secretarí­a sólo para satisfacer el ego del llamado “Curita” por sus compañeros del gabinete legal… Ahora, y luego de la caí­da de “Los niños fieles” en la encuesta, mejor dicho, el descarrilamiento, pues nunca levantaron, figura, según se sabe (si se sabe bien) en el plan “A” de Duarte, con el visto bueno de Plutarco Fidel Herrera Elí­as Calles para la gubernatura de dos años, pues sienten que por encima de los senadores priistas, Pepe Yunes y Héctor Yunes, es el único, el único, el único que puede cuidar la espalda a Duarte…

ESCALERAS: Buganza, quien luego de haber vencido a la muerte igual que Gustavo Sousa Escamilla encarnada en el cáncer, está más fiero y lleno de vida que nunca, se ha vuelto, como buena parte del gabinete legal, un fanático del ego… Y, por tanto, y a partir de su par de derrotas camino a la gubernatura (2004 y 2010), con dos años como gobernador le serí­an suficientes, primero, para satisfacer su ego en su máxima expresión… Segundo, hacer felices a los obispos y el arzobispo de Veracruz, que fue el más fidelista, es el más duartista y serí­a el más bugancista… Tercero, porque demostrarí­a a la elite panista que estaba en el camino correcto luchando por la silla embrujada de palacio… Y cuarto para garantizar la tranquilidad de Duarte al dejar palacio de gobierno… Pero, bueno, y en tal caso que la profecí­a se cumpla, tal estarí­a por verse, si se considera lo siguiente… El primer cargo público de Buganza fue en el Ayuntamiento de Córdoba por dedazo del filósofo César Leal Angulo, ya fallecido, entonces, el gurú máximo del PAN… Años después, el grupo de Alejandro Vázquez Cuevas, “El pipo”, traicionó, con sus hordas (Abel Cuevas Melo, Agustí­n Basilio, Bernardo Margarito Téllez, etcétera) al viejo patriarca, y Buganza calló, guardó silencio, se echó para atrás como San Pedro cuando el soldado aquel lo señaló como discí­pulo de Jesús… Por eso habrí­a de recordar la enseñanza filosófica de Fernando Gutiérrez Barrios: “Quien traiciona una vez… traiciona siempre”… Y más en un tipo como Buganza, quien luego de ser beneficiado por el PAN con varias curules pluris y la candidatura a gobernador, cuando el dedo favoreció a otro (Miguel íngel Yunes Linares), igual que las criadas, se quitó el delantal al cuarto para las doce y se fue del partido… Confiar en polí­ticos así­, más que un riesgo, constituye un suicidio…