Dí­a 11: Aunque cada dí­a es más complicado sobre todo por este bendito dolor en el cuello y la espalda que no me da tregua, me mantengo firme y tranquila, agradeciendo las oraciones de todos ustedes que estoy convencida son las que me mantienen con vida, porque en Veracruz no hay ley que valga para Duarte, que es quien deberí­a, junto con su Procurador estar en esta celda porque fabricar pruebas, tan como demostraremos en el juicio es un dato grave por el que tarde o temprano tendrán que responder.

Me cuentan mis abogados que se arman montajes a cada tato, les reitero que confí­o 100% en Jorge Winckler y agradezco al alcalde Miguel Yunes Márquez, que ni un momento me haya dejado de demostrar su solidaridad y que me sentí­ muy orgullosa de él, que hiciera lo correcto y legal, no intervenir de ningún modo y confiar en la justicia (no estatal, nos queda claro).

Del viernes que regresé del hospital al dí­a de hoy martes, no dejo de sorprenderme de las mentiras de la Procuradurí­a del Estado. Como periodista revisaba a diario el Twitter de la dependencia y veí­a los miles de detenidos a diario aseguran encierran en prisión. NO ES VERDAD. La Procuradurí­a que dice ser capaz de detener y rescatar a 186 personas en 3 semanas, en cinco dí­as no ha puesto a disposición del único “penal” que hay en los alrededores a un solo lí­der de ninguna banda, por lo que escucho desde el pasillo, solo han llegado a lo mucho 3 o 4 personas, por delitos como fraude y anoche llegó el homicida que mato a su esposa, y a quien prácticamente detuvieron los vecinos, porque creo arrastró el cuerpo fuera de su casa.

Eso sí­, los custodios (y fue así­ como me di cuenta de su presencia) lo resguardan con la mayor precaución y alejado de los demás por el posible transtorno que padezca, digo nos queda claro que sano de la mente no está, nadie en su sano juicio comete un acto así­ de manera deliberada.

Entonces Luis íngel Bravo ¡Donde están los delincuentes que tienen sumida a la zona conurbada en un infierno de inseguridad! ¡Sus ministerios públicos y jueces obedientes NO a la LEY sino a sus órdenes, donde los meten he! Aquí­ no y doy fé de ello.

Hoy también t en otro orden de ideas, me llega el documento de gracias a Jorge Morales, la comisión enví­a a Arturo Bermúdez, exigiéndole que me permita seguir escribiendo en mi ligar. Me dice uno de mis abogados que se carcajeaba y dijo algo así­ como “bueno y estos pendejos no saben de donde viene la orden”…no lo sé, no me consta que lo haya dicho pero lo no dudo. Ayer vino Erick Lagos, también, su cuñado dio el alta médica para que me sacaran prácticamente arrastrada del hospital , aun cuando consta la lesión en las cervicales y que he perdido fuerza en un brazo y se me entumen las manos.

Debe estar buscando la manera de librarlos del problema que no es menor, ya que existe una ORDEN del juez federal que debí­an regresarme el mismo viernes al hospital. Dicen que Duarte y Luis íngel Bravo, dijeron que por “los suyos” aquí­ me quedaba hasta que ellos se les pegara la gana.

Incluso me cuenta mi abogada informante, (la cual por cierto diario me trae cada uno de sus recados), que el propio Fidel Herrera le llamó a Duarte para decirle que el asunto con lo “rebelde” que soy podrí­a tomar otras dimensiones y que este le dijo que le valí­a, que a costa de lo que fuera me tendrí­a encerrada hasta doblarme y verle suplicando…No pues ya estuvo que me dieron cadena perpetua, porque la JUSTICIA no se MENDIGA, se exige.

Al menos espero a la familia del joven que lamentablemente murió en el accidente, le estén cumpliendo lo prometido, no hay dinero que mitigue el dolor de perder a un ser querido, pero si en algo vale su palabra, que yo creo que en nada tengan medio gramo de madre y después de usar el dolor de una familia para “castigarme” cuando BIEN SABEN FUE UN ACCIDENTE al menos den lo prometido.

Poco a poco rearmamos el caso y surgen más dudas que ya con los elementos probaremos en la mano comprobaré con ustedes sobre lo que pudo haber ocurrido pero de momento lo único que puedo decir es que nada dicho por la procuradurí­a del estado es verdad, la intención tan es callarme que siguen retrasando el cumplimiento de las ordenes del juez para que pueda seguir escribiendo, lo tengo que hacer a escondidas y con mi abogado enviarlo, o de plano dictarle.

Es importante “señalar que hago responsable a Remigio Ortiz de cualquier cosa que le pueda pasar a las presas de los cuales he denunciado en este espacio, así­ como de la seguridad de los custodios que se nieguen a maltratarme como él , a solicitud de Bermúdez y Duarte ha solicitado.

Aquí­ no solo mi vida corre peligro, también la de quienes se acercan a mí­ para compartir sus historias con la esperanza que alguien afuera los ayude. Agradezco a Derechos Humanos Nacional, por tomar mi caso, la Comisión Estatal, Perera Escamilla y Abraham, siguen escondidos como el par de serviles y poco hombres que son, hasta mañana, ya falta menos.