Acaso de igual manera la declaratoria de “la ciudad más bella del paí­s” se refiera si la fuerza policiaca ocupa el lugar número uno en abusos, excesos y atropellos en la Comisión Estatal de Derechos Humanos, el puerto jarocho mantiene el récord Guiness en la materia… De igual manera otra de las premisas sea que cuando por aquí­ aterrizaron las plazas y centros comerciales en Boca del Rí­o, el centro histórico se fue hundiendo poco a poco hasta llegar a la ciudad fantasma que hoy es, con un centro urbano que en las noches, y más, mucho más, en los fines de semana, huele y apesta a tacos y tamales y hot dog y esquites y hasta orines como un muladar público… Acaso también se refiera a que ninguna otra ciudad de Veracruz, ni siquiera, vaya, de la república tiene tantos y tantos locales comerciales y edificios en venta y/o cuando menos para rentarse… Quizá sea “ciudad bella”, porque en Los Portales y en el zócalo y en el parque Zamora, la prostitución masculina y femenina ha alcanzado grado de adopción, de tal manera que forma parte del paisaje urbano…

BALAUSTRADAS: bueno, el epí­teto de “la ciudad más bella del paí­s” también puede referirse a que apenas el visitante entra a la ciudad por el lado norte y por el lado sur, y la cloaca emanada del Golfo de México, el apeste nauseabundo y putrefacto de las aguas negras descargando Por decreto el puerto jarocho “es la ciudad más bella del paí­s”… Y, bueno, entonces, ¡qué viva Cantarranas… que también es bella! en el mar vaporiza la respiración humana, sin que ninguna planta de tratamiento, ni tampoco el llamado saneamiento de la bahí­a hayan sido suficiente para exterminar los malos olores… “Ciudad bella”, también, porque mientras las cantinas y los bares y los antros y los prostí­bulos y el aviso económico sexual se han multiplicado en la ciudad, cada vez cierran más librerí­as, simplemente, porque la compra de libros es baja y resulta incosteable… “Ciudad bella” porque, acaso, quizá, y ante el desempleo imparable el número de changarros se ha disparado en la ví­a pública y los puestos ambulantes superan el encanto del querreque, la bamba, el tilingo tilingo y otras cositas… Bella ciudad de la nación, porque, y como dice el Instituto de la Vivienda, la ciudad está llena de invasiones de lotes, con un montón de asentamientos humanos irregulares, sin que ninguna autoridad sea capaz de restablecer el orden jurí­dico y el orden social… “Ciudad bella” quizá, sin duda, porque el malecón del paseo y el bulevar cada mañana y cada tarde quedan infectados de excremento de los perros, las mascotas que los dueños llevan a pasear y a respirar la brisa marina y hacer sus necesidades básicas en el mismo espacio donde cientos, miles quizá, de jarochos ejercitan en cada nuevo amanecer el cuerpo y el espí­ritu… Bella, bellí­sima ciudad, porque en los antros suelen colocar cabezas decapitadas a seres humanos como parte del atractivo turí­stico, en tanto la fama pública consigna que la venta de droga se multiplica como los peces y los panes…

ESCALERAS: “Ciudad bella”, pues, y más bella que, por ejemplo, y según el ranking nacional, San Luis Potosí­, Guanajuato, San Miguel Allende, Guadalajara, el Distrito Federal, Morelia, Puebla, Cancún, Monterrey, Querétaro, León y Zacatecas, y, bueno, hasta Coatzacoalcos, allí­ donde el pantano invade la mancha urbana, pues, con todo, ha sido declarada por el Gabinete Estratégico, propiedad de Liévano Sáenz, como la novena ciudad ideal de la república para vivir y vivir a todo dar… Bella, por ejemplo, Fortí­n, sólo, entre otras razones, por el clima, la quietud de la provincia, el aire limpio y respirable, la vida feliz, el arrobamiento del espí­ritu, la quietud de los dí­as y las noches… Bella, Santiago Tuxtla, para la creación artí­stica y la recreación del alma y del corazón, la llamada Suiza veracruzana… Bella, Catemaco, para retirarse a vivir con la pensión universal en un encuentro inusitado con la naturaleza… La estrofa dice que “Sólo Veracruz es bello”, pues así­ lo dijo el guitarrista de la iguana y también el Santo Papa… Pero ¿Veracruz estado y/o Veracruz puerto?... Y de ser así­, entonces, dí­ganse las razones para llegar a tal conclusión tan osada, temeraria y aventurera, nomás, nomás pa”™salir del paso… Quizá, por ejemplo, bella para los carteles porque aquí­ uno de ellos, José Albino Quintero Meraz llegó a tener 12 casas de seguridad en el fraccionamiento Costa de Oro, de Boca del Rí­o, y otras más en las colonias populares del puerto jarocho, pues en todo caso, la zona conurbada Veracruz-Boca del Rí­o, conurbadas son y, por tanto, una sola… En fin, que por decreto, los 700, 800 mil jarochos saben ya que el puerto “es la ciudad más bella del paí­s”… ¡Hosanna, hosanna en las alturas!... ¡Y que viva Cantarranas que también es bella!...