Expediente 2012
Ajuste de cuentas priistas
Luis Velázquez
10 de diciembre de 2012

Siete dí­as después de que Enrique Peña Nieto tomó posesión y regresara el PRI a Los Pinos, el góber tricolor de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo, un joven inexperto cuyo único antecedente en polí­tica es su trabajo en la SEFIPLAN de su único padrino y mecenas, Félix González Canto, demostró el México autoritario y excluyente, represivo y autoritario del siglo pasado que tanto rechaza el ciudadano.
El viernes 7, el góber encarceló a su enemiga y rival polí­tica, la alcaldesa de Tulum, Edith Mendoza Pino, con todas las agravantes de la ley en un Estado de Derecho, cuya existencia suele darse en la ficción y en las clases sobre jurisprudencia en las facultades de Leyes.
Los hechos son los siguientes:
1.-orge pertenece a la capilla polí­tica de su antecesor, Félix González Canto, ahora senador de la República, en tanto la alcaldesa pertenece a la capilla de Pedro Joaquí­n CoLdwell, exgobernador de Quintana Roo antes de cumplir los 30 años de edad, expresidente del CEN del PRI y secretario de Energí­a con Peña Nieto y, por tanto, en el sistema priista el aterrizaje de un grupo polí­tico al poder significa un carpetazo, por todos los flancos, al anterior.
Habrí­a de recordar, por ejemplo, que José López Portillo encarceló a varios secretarios del gabinete de Luis Echeverrí­a y Miguel de la Madrid envió a la cárcel a varios secretarios de López Portillo. El último fue Ernesto Zedillo, privando de su libertad al hermano mayor de Carlos Salinas de Gortari, Raúl, acusado de un asesinato. Es más, en QR, el último góber encarcelado fue Mario Villanueva, “El chueco”, por sus ligas con el narcotráfico.
2.-El primer jab de Borge contra la alcaldesa de Tulum, a quien por sus pistolas desaforó, fue a través de la Auditorí­a Superior del Estado, la que dictaminó que la edil habrí­a desviado 69 millones de pesos para su peculio.
3.-El siguiente operativo sucio y cochino desde la cúspide del poder fue que una regidora panista, Silvia Lugo, se prestó a interponer una solicitud de juicio polí­tico contra la alcaldesa priista por desví­o de recursos. Es decir, Borge tiró la piedra, escondió la mano y utilizó a una panista para desfogar rencores y odios.
4.-El siguiente fue que el Tribunal Electoral de QR “declaró improcedente la solicitud de la alcaldesa para regresar a su cargo, al que habí­a solicitado un permiso”. (La jornada, Julio César Solí­s, corresponsal, sábado 8 de diciembre ,2012)
5.-El paso siguiente fue que el Congreso al servicio del góber Borge Angulo citó a la alcaldesa desaforada para defenderse de los cargos imputados y, bueno, el dictamen será en contra, porque el peso y la fuerza del Estado de Derecho, representada por Roberto Borge, está en su contra.

TODO EL PODER POLITICO EN CONTRA…

6.-Desde un principio, Roberto Borge lanzó la cuchilla estatal en contra de la alcaldesa. Por ejemplo, un montón de policí­as la tuvieron secuestrada en su casa hasta que, de plano, doblada ante las presiones, firmó la solicitud de licencia para separarse del cargo por 90 dí­as, argumentando “motivos de salud”. Incluso, habrí­a de recordarse que de acuerdo con la bí­blica cultura priista, basta con presionar a un funcionario a declararse enfermo y renunciarlo, bajo la inteligencia de que al negarse terminará en la cárcel.
7.-Por añadidura, desde dí­as anteriores al 7 de diciembre, Roberto Borge lanzó la prensa escrita, hablada y digital a su servicio en contra de la alcaldesa, de tal manera que cuando la exedil leyó las notas supo que alguien mecí­a la cuna y se le avisaba de un tsunami en su contra. Es decir, en el siglo pasado, en el esplendor de la presidencia imperial, tanto los gobernadores como los presidentes de la República renunciaban al polí­tico incómodo a través de los medios. Luego, supo que el rafagueo mediático iba en serio, cuando en un retén policiaco la detuvieron en su automóvil argumentando que transportaba armas de fuego.
8.-Incluso, en el inter, el senador Félix González Canto, padrino y mecenas de Roberto Borge, se quiso pasar de vivo con la exalcaldesa, a quien solicitó fumara la pipa de la paz con el góber. La ex edil aceptó y luego González Canto le avisó que el góber, jefe polí­tico, económico, social, policiaco y mediático de Quintana Roo, sólo podí­a detener “la orden de aprehensión en su contra”. Es decir, tirar la piedra y esconder la mano. Mejor dicho, el terror en su plenitud.
9.-El fondo del asunto es uno solo: Félix González Canto y Roberto Borge enfrentados a Pedro Joaquí­n Coldwell por el cacicazgo polí­tico. El botí­n, la riqueza natural de Quintana Roo, entre ellos, Cancún, el paraí­so de los pedófilos como lo ha denunciado y documentado la escritora y periodista, Lydia Cacho en su libro “Los demonios del Edén”. De igual manera, el botí­n polí­tico del presupuesto oficial; también, el botí­n polí­tico de las alcaldí­as y el Congreso y ni se diga, claro, el botí­n en terrenos y edificios y negocios lí­citos e ilí­citos al cobijo del poder.
10.-Un ajuste de cuentas, pues, entre la camarilla en el poder polí­tico con su antecesora. González Canto contra Coldwell; Plutarco Elí­as Calles contra ílvaro Obregón; ílvaro Obregón, asesinando a Emiliano Zapata y Pancho Villa; Lázaro Cárdenas, expulsando del paí­s a Elí­as Calles; José López Portillo, encarcelando a los jarochos Félix Barra Garcí­a y Eugenio Méndez Docurro, secretarios en gabinete echeverrista; Miguel de la Madrid, enviando a la cárcel a Porfirio Serrano, director de Pemex, de López Portillo. Etcétera. Eso significa, en el México del siglo XXI, el pleito del góber Roberto Borge con la exalcaldesa de Tulum. Y ni hablar, cuando los poderes ejecutivo, legislativo, judicial, policiaco y mediático de QR están del lado de Borge Angulo y en contra de la expresidenta municipal, será condenada culpable por el presunto desví­o millonario. Así­ se estilaba en el siglo XX cuando el PRI era partido único: desde Plutarco Elí­as Calles hasta Ernesto Zedillo.