El virrey, agrega, también “manda en su estado y a quienes tampoco convienen las medidas como el Sistema Nacional Anticorrupción y prefieren seguir nadando de muertitos”… como fuera la frase bí­blica acuñada por Enrique Peña.

Tal cual, bastarí­a una miradita en Veracruz donde se concitan las siguientes caracterí­sticas.

Uno. La sumisión del poder Legislativo, incluidos siete de diez diputados panistas, al jefe del Poder Ejecutivo.

Dos. El vasallaje del poder Judicial al poder Ejecutivo, con tal de seguir usufructuando los privilegios y canonjí­as como, por ejemplo, sueldos jugosos, pensión excepcional, además de trabajar unas cuantas horas del dí­a y gozar de asueto los dí­as que así­ convengan a sus intereses.

Tres. El control de los partidos polí­ticos, donde la percepción ciudadana es que hay un PAN rojo, un PRD rojo, un PT rojo, un PVEM rojo, un PANAL rojo, una AVE roja y un PES rojo.

Cuatro. El control de los lí­deres sindicales, mucho de los cuales se han convertido en caciques de su gremio, incluso, en unos casos, con más de 30 años de dirigencia.

Cinco. El control de la mayor parte de las elites eclesiásticas, empezando por el arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios.

Seis. El control de los medios.

¿Virreinato en Veracruz?

II

Por eso mismo, la vicepresidenta de la Cámara de Diputados dice que le han otorgado más facultades a la Auditorí­a Superior de la Federación, ASF, para intervenir en los gobiernos estatales en el uso del cien por ciento de los recursos federales.

Se refiere así­ a “tantos conflictos de intereses y desví­os detectados en el uso y manejo del dinero público” (Excélsior, domingo 1 de marzo, 2015).

Es el caso, por ejemplo, del gobierno de Veracruz En la experiencia de la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Beatriz Zavala, los gobernadores del paí­s son unos virreyes, dueños del dí­a y de la noche y de las vidas ajenas donde la ASF observó irregularidades por siete mil millones de pesos que, bueno, según Javier Duarte, “en ningún caso se trata de un daño patrimonial” y, por el contrario, las crí­ticas que arrecian son porque estamos en tiempo electoral.

No obstante, queda manifiesto un hecho: corresponde a la ASF determinar si, en efecto, “ningún daño patrimonial” existe en la tierra jarocha con tales fondos federales.
Los virreyes, dice Beatriz Zavala, mandan en sus estados.

Pero desde el altiplano la ASF los vigila.

Tan es así­ que meses anteriores Duarte despidió a un trí­o de colaboradores porque “defraudaron mi confianza”, según dijo, en el manejo de los recursos federales, como fueron Pablo Anaya Rivera, Gabriel Deantes Ramos y Édgar Spinoso Carrera, los últimos dos rehabilitados, como si nada hubiera ocurrido.

III

Ahora que el Sistema Nacional Anticorrupción fue aprobado por la Cámara de Diputados, corresponde al Senado el siguiente paso.

Pero según Zavala Peniche “el Senado priista podrí­a salir con marrullerí­as y cambiarla”.

Incluso, si el Senado la aprobara y fuera remitida a los gobernadores virreyes pudiera darse el caso que “hagan tardado el proceso de ratificación en los Congresos locales” (sic) (Excélsior, 01 de marzo, 2014).

Claro, porque se tratan de fondos millonarios, donde los virreyes son capaces de todo con “tal de obtener el lí­quido lácteo”, succionadores profesionales de acuerdo con la filosofí­a polí­tica de Fidel Herrera, aquel gobernador que al cuarto para las doce de entregar el mandato constitucional pidió un crédito de diez mil millones de pesos, cuyo destino siempre quedó bajo sospecha.

Además, si el Congreso de la Unión ha otorgado más facultades a la ASP para vigilar al cien por ciento los recursos federales en cada estado del paí­s, entonces, queda pendiente el mecanismo administrativo para fiscalizar el presupuesto anual de cada virrey, que en el caso de Veracruz es de cien mil millones de pesos.

A la fecha, en el V año del sexenio duartista, 400 mil millones de pesos se han ido sin que ninguna autoridad (ORFIS, Comisión de Vigilancia del Congreso, SEFIPLAN, Contralorí­a, etcétera) haya aplicado la lupa.

Claro, dirán los polí­ticos oficiosos que el Congreso local ha aprobado las cuentas públicas de los años 2010, 2011, 2012 y 2013.

Pero, al mismo tiempo, habrí­a de recordar la experiencia de la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, los gobernadores son unos virreyes y son dueños del dí­a y de la noche y de las vidas ajenas y tienen sometido a todos, entre ellos, al Poder Legislativo, que según la ley ha de vigilar la í­ntegra aplicación del gasto público.

POSDATA: PEMEX está hundido… Son tres las causas… Una, la caí­da del precio del petróleo en el mercado internacional… Dos, la depreciación del tipo de cambio… Y tres, las pensiones… Además, el saqueo como cuando Francisco Labastida Ochoa fue candidato presidencial y el sindicato petrolero desvió 8 mil millones de pesos para la campaña electoral…Además, los excesivos privilegios al sindicato que permiten al lí­der, Carlos Romero Deschamps, un avión para que su hija pasee con sus mascotas… Por eso, el despido incalculable de empleados… Diez mil, entre de confianza y sindicalizados el año anterior… Más el número incalculable para este año…Veracruz, unas de las entidades federativas más afectadas, con lo que el desempleo se multiplicará…